Van 127 días de gobierno y el priista César Duarte sigue libre
Se trata de un caso plagado de evidencias. César Duarte mantiene un cúmulo de demandas en su contra, cada una sólida y bien estructurada, por lo que debería de estar en prisión según la ley mexicana. Pero el gobierno del mexiquense Enrique Peña y el de López Obrador han prometido acciones concretas para traer al exgobernador chihuahuense ante la justicia y nada ha pasado. Por el momento. el Duarte del norte vive cómodamente en Estados Unidos.
A cuatro meses del gobierno obradorista, no hay avances en el caso. Todo esto a pesar de que el presidente de México viajó hasta Chihuahua para prometer que se iniciaría el proceso de extradición de uno de los priistas que más han abusado de su cargo. El tema queda pendiente desde hace semanas y no hay ningún avance claro en el tema. La fiscalía mexicana ha guardado silencio sobre el tema, mientras uno de los abogados demandantes aún espera una audiencia con el fiscal mexicano.
Las pruebas en contra de César Duarte son tan grandes que en cualquier otro país estaría al menos detenido para avanzar en el proceso. Recordemos que el actual gobernador de Chihuahua acusó al gobierno de Enrique Peña Nieto y al canciller Luis Videgaray de evitar que la justicia mexicana diera con el exgobernador. Lo cierto es que a pesar de la evidencia, no se avanzó nunca en el tema. El gobierno de López Obrador prometió avances pero tampoco se ha solicitado la extradición.
En Chihuahua están pendientes del tema, mientras la población paga las deudas que dejó el priista. Son al menos 55,000 millones de pesos los que Chihuahua adeuda después del gobierno del PRI en la entidad norteña. El problema financiero es tan grande que serán al menos tres generaciones de chihuahuenses las que paguen el adeudo que deja César Duarte. Todo parece indicar que, sumado a intereses, el estado podrá pagar todo hasta el 2044.
Lo cierto es que López Obrador ofreció una extradición inmediata que no llega. Para el abogado Jaime Chávez, no se han encontrado verdaderas acciones en contra de la corrupción en el gobierno morenista, por lo que la captura de César Duarte podría favorecer de inmediato al discurso anticorrupción del tabasqueño. Recordemos que para marzo se había prometido también una consulta ciudadana para ver si se actuaría contra los expresidentes mexicanos que enfrentan acusaciones de corrupción. La votación nunca llegó.
El caso contra César Duarte continúa estancado en la integración de la averiguación previa. Todo esto a pesar de las diversas demandas realizadas por el gobernador Javier Corral y la presión y evidencia de colectivos, abogados y activistas. Chávez afirma que han pasado años de reunión de pruebas suficientes para que el priista sea detenido y traído a territorio mexicano para enfrentar a la justicia, pero nada ha pasado. Cinco años de espera sin avances.
Detrás de este silencio sobre el caso Duarte está un entramado que expone a figuras del PRI. Se sabe de un desvío de recursos que arrancó en la secretaría de haciendo y que terminó en el financiamiento de campañas electorales para el PRI. Todo esto a través de Chihuahua, mientras era gobernada por César Duarte. El tema es delicado ya que apunta a figuras élite del priismo peñista como Luis Videgaray y el propio expresidente del PRI. Hasta el día de hoy, el nuevo gobierno no ha generado avances claros.