AMLO no apoyará a los refugios para mujeres violentadas
Las mexicanas ha vivido años negros desde el repunte de la violencia apuntó directamente hacia ellas. Los feminicidios, secuestros y abusos sexuales a mujeres ha ido a la alza en varios estados del país y el papel de las estrategias de seguridad ha sido torpe e insuficiente. Por lo tanto, organizaciones civiles y sociedades independientes han tenido que cubrir la tarea de defender a las mujeres maltratadas sin posibilidad de defenderse.
Hablamos de los centros de refugio para mujeres violentadas en el país. Su operación se ha logrado durante años gracias al apoyo de privados pero también a subsidios del gobierno mexicano que el día de hoy rompió de tajo con el apoyo económico. El mantenimiento de estos refugios depende en buena parte del dinero que el gobierno nacional destina, por lo que esta negativa enciende las alarmas ante una posible desaparición de varios refugios.
La decisión responde a las acusaciones que el presidente ha hecho por presuntos desvíos de recursos que varias organizaciones civiles han hecho con los apoyos. López Obrador prometió que no habrá más dinero público financiando centros o refugios creados por oenegés. Estos refugios habían solicitado a finales del año anterior una ayuda económica de 346 millones de pesos, algo que ha sido rechazado en automático hace unas horas.
Los refugios para mujeres violentadas se encuentran en cada estado del país y buscan auxiliar a mexicanas que han sido agredidas o amenazadas de muerte. Esta opción brinda capacitación, seguridad y vivienda a estas personas, mientras se solucionan sus problemas legales o de integridad. Aseguran que la cancelación definitiva de los subsidios pone en riesgo a 20,000 mujeres que dependen de este servicio.
Invitan “urgentemente al gobierno federal a subsanar esta acción inadmisible y lamentable que vulnera los derechos de las mujeres a vivir libres de violencias, que va en contra de los tratados internacionales y nacionales en la materia que México ha firmado y ratificado”, comenta la red en un comunicado. La periodista Lydia Cacho también se ha mostrado furiosa por la decisión federal. “¿Qué harán las miles de mujeres y niñas sumidas en la desprotección, el abandono institucional y la pobreza extrema?”, dijo.
Recordemos que México es un país en donde se asesinan a siete mujeres al día por razón de género. Estas cifras son alarmantes y ponen a nuestro país como una de las más inseguras para la mujer en el continente americano. Con jueces sin perspectiva de género, policías mal capacitados para atender violencia de género y estrategias de seguridad incapaces, estos refugios representan un gran apoyo para las mujeres agredidas.
Con casi 20 años de labor, estos refugios podrían desaparecer en caso de que la decisión obradorista se mantenga. Incluso se ha señalado que gobiernos anteriores como el de Vicente Fox ya habían intentado cerrar estos centros de apoyo y resguardo para mujeres que vivieron episodios de trata, secuestro, violación y violencia en general. La mayoría de las mexicanas que habitan estos refugios son de escasos recursos, por lo que el cierre de apoyo federal podrá devolverlas a las calles, en donde podrían incrementarse los feminicidios.
La gran crítica es que ante la incapacidad del gobierno se tuvieron que crear este tipo de esfuerzos independientes para ayudar a las mexicanas. “El gobierno debería contar con suficientes refugios para mujeres víctimas de violencia. Pero como no los tiene, había una convocatoria que apoyaba financieramente a organizaciones que los tuvieran. Hoy, esa convocatoria se suspendió”, comenta un activista. Además, el apoyo de estos refugios se extiende a los hijos de las mujeres afectadas, quienes también quedan desprotegidos.
El gobierno ha asegurado que no se cancelarán los subsidios, pero tampoco dejó bien claro si esto será permanente o solamente por este año. Aún así, promete continuar con la revisión de presupuesto asignado a programas que involucren a organizaciones civiles.