México se niega a condenar la situación en Venezuela
Una mujer colombiana grabó con su celular el momento en el que López Obrador afirmó que no se iba a involucrar con la situación política de naciones extranjeras. Estas situaciones son comunes para el presidente, ya que gusta de viajar en aerolíneas comerciales y se rodea de todo tipo de personas. La mujer le preguntaba al tabasqueño si condenaría al gobierno de Nicolás Maduro, algo que ya hacen en conjunto varias naciones del continente americano.
No solamente López Obrador se niega a hablar del tema, su gobierno también ha marcado distancia del famoso grupo de Lima, una alianza multinacional que busca condenar el gobierno chavista de Maduro y buscan la democratización de uno de los países más ricos en reservas naturales y petróleo a nivel continental. Para el gobierno mexicano no hay necesidad de condenar ni este ni ningún otro gobierno, por más represor que este sea.
La intención de este grupo de naciones latinoamericanas es no reconocer el actual periodo de gobierno de Nicolás Maduro, el hombre que quedó al frente de Venezuela después de la muerte del general Hugo Chávez. La unión está conformada por la Guyana, Honduras, Panamá, Paraguay, Perú, Santa Lucía, Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica y Guatemala. Recordemos que Colombia y Brasil ya aseguraron que buscarán imponer su democracia en la nación bolivariana con la ayuda de Estados Unidos.
México decidió no firmar la misiva de este grupo, con lo que exhibe su agrado con el actual gobierno chavista en Venezuela. Esta nación ha visto cómo huyen millones de venezolanos hacia Brasil, Paraguay, Bolivia, Colombia e incluso México, asegurando que las condiciones de salud, violencia, inseguridad y represión son intolerables. El estado de Querétaro, en la nación mexicana, es el que más ha recibido venezolanos que trabajan para enviar dinero a sus familias.
López Obrador no solamente no condena este gobierno del sur del continente, también fue criticado por invitar a Nicolás Maduro a su toma de protesta en diciembre pasado. Los partidos opositores, sobre todo el partido católico-conservador, aseguraron que esto era un insulto para la comunidad venezolana recluida en México y otras naciones, y también para las millones de personas que aún viven en Venezuela. Obrador aseguró que su gobierno no se dedicará a criticar a otros gobiernos.
Hasta antes de que el gobierno de Morena tomara el poder, México era una de las naciones que más promovía y firmaba las sentencias del grupo de Lima. Con Enrique Peña Nieto en el poder, siempre se condenó la actitud de Nicolás Maduro al reelegirse constantemente en elecciones poco limpias en Venezuela. Fue incluso Luis Videgaray uno de los peñistas que más condenó al gobierno venezolano durante el sexenio priista que terminó el último día de noviembre del 2018.
La última elección en Venezuela estuvo plagada de errores. En principio, los opositores al gobierno de Maduro están presos, desaparecidos o inhabilitados para presentarse en cargos públicos. Las organizaciones internacionales que generalmente vigilan los comicios electorales tampoco pudieron ingresar a comprobar si realmente Maduro había ganado con ese aplastante 67% de los votos, en mayo del 2018.