Obrador promete repartir las secretarías federales por todo el país | BREAKING

Obrador promete repartir las secretarías federales por todo el país

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Una de las promesas de campaña de Manuel López Obrador que más adeptos está generando es la descentralizar al gobierno federal. Su idea, aunada a una limpieza profunda de la corrupción en las instituciones federales, es la de crear un “crecimiento parejo en todos los estados de la república mexicana”.

La idea del tabasqueño es la de no concentrar estas dependencias únicamente en la Ciudad de México, un proceso que se ha llevado a cabo básicamente desde la revolución mexicana. Muchas propuestas de izquierda, durante décadas, han comentado que la centralización del poder daña y deja sin oportunidad a los demás territorios del país.

Conocido como el candidato mejor posicionado según las encuestas para ganar la presidencia en las próximas elecciones del 2018, Obrador mantiene propuestas radicales que distan mucho de las formas políticas del actual gobierno de Enrique Peña Nieto. Una de las promesas de campañas más populares del tabasqueño es la de vender de inmediato el avión presidencial de lujo que se compró el actual presidente al llegar al poder.

Dentro de la nueva propuesta de descentralización de las dependencias federales está la de recolocarlas en estados clave del país, según la función de cada una. Obrador sugiere trasladar a Petróleos Mexicano a Ciudad del Carmen, en Campeche, muy cerca de donde recientemente se ha descubierto el mayor yacimiento petrolero de las últimas décadas.

Entre las otras opciones de movimiento de secretarías, se aconsejará, según el político de izquierda, trasladar a la secretaría de Energía a Tabasco; la Comisión Federal de Electricidad al estado de Chiapas; la Comisión Nacional del Agua a Veracruz, en donde se encuentran varios de los ríos más importantes del país; la secretaría de Educación Pública al estado de Puebla y la secretaría de Salud a Guerrero, uno de los estados con los más altos índices de mortalidad por enfermedades y una grave crisis de inseguridad.

La propuesta de Andrés Manuel es precisamente la de reactivar la capacidad laboral en estados que han sido descuidados por el actual gobierno federal. La llegada de estas dependencias a estos estados de la periferia generaría, según el líder de Morena, mejor condiciones de vida para los trabajadores y mayores fuentes de empleo en las zonas. Esto reactivaría la economía de cada estado y generaría una “mejor vida pública del país”.

Para el candidato favorito de izquierdas, el cambio en la manera de ejercer el poder federal necesita ser radical para “lograr el renacimiento de nuestro país”. Para lograr este tipo de cambios estructurales en el tablero político mexicano, Obrador asegura que convencerá a los trabajadores de estas dependencias para mudarse a las nuevas sedes.

Lo hará, asegura, a través de interesantes acuerdos para generarles buenas condiciones de vida a través de créditos en Fovissste, con los que tendrían un hogar apto para garantizar un buen cambio de residencia. Hasta el momento, los sindicatos de trabajadores no han comentado al respecto sobre esta iniciativa.

Andrés Manuel aseguró que se está analizando sacar más dependencias de la Ciudad de México para recolocarlas en estados claves del país. “¿Por qué no en Guanajuato colocar Nacional Financiera?, ¿por qué no la Secretaría de Economía en Nuevo León?, ¿por qué no la Secretaría de la Defensa en Jalisco?, ¿por qué no la Secretaría de Agricultura en Ciudad Obregón, Sonora, o la comisión de Pesca en Mazatlán?”, dijo el líder de Morena en un mitin reciente.

Para lograr esta iniciativa, Obrador tendría que concordar acuerdos con sindicatos, trabajadores, dependencias, entre otras trabas. Si bien la iniciativa suena favorable desde arriba, una mirada más a fondo revela una serie de conflictos y acuerdos para poder hacerla posible. Empezando por las cámaras legislativas y luego por los acuerdos con cada trabajador y cada secretaría, lo que sin duda levantaría varias protestas.

Con estas iniciativas, Obrador busca impulsar el apoyo a su candidatura en los distintos estados del país a pocos meses de que inicien las candidaturas presidenciales más competitivas de la historia reciente de México.