Gobierno le dará 15,000 pesos a familias afectadas en Tlahuelilpan
Han pasado ya meses desde que el robo de combustible mexicano derivó en tragedia. En una comunidad hidalguense alguien perforó un ducto de la petrolera nacional y los pobladores de la comunidad más cercana se lanzaron con cubetas para recoger la gasolina esparcida en el terreno. Horas después, y con una mínima vigilancia por parte de las autoridades, la fuente de gasolina explotó.
Las personas cercanas a la explosión de Tlahuelilpan murieron inmediatamente por las quemaduras (se encontraban bañados en combustible). Algunas alcanzaron a correr y otras más fueron atendidas en el hospital. Varios de los afectados por la explosión murieron por los daños causados en su cuerpo y ahora el gobierno ha prometido 2.3 millones de pesos en ayudas a sus familias.
Resultado de la explosión en Tlahuelilpan quedaron decenas de niños huérfanos y familias sin sustento inmediato. El gobierno ha asegurado que a pesar de que las personas de las comunidades acudieron al ducto de manera voluntaria, la tragedia tuvo los alcances suficientes para reparar los daños en las familias locales. Se entregarán apoyos de hasta 15,000 pesos por familia afectada en la tragedia más visible de la guerra contra el huachicoleo.
Se trata de 157 familias que será beneficiadas en los próximos días. Después de la tragedia en Tlahuelilpan, el terreno quedó prácticamente inservible y se han registrado más ductos abiertos en la zona, por lo que se ha puesto una atención especial a la actividad huachicolera en Hidalgo, un estado panista que arrastra varios años de problemas sociales y pobreza en comunidades como Tlahuelilpan.
El saldo final de la tragedia con 135 personas muertas por la explosión directa o quemaduras posteriores; además, se informó que el gobierno mexicano aún está atento a las diez personas que se encuentran hospitalizadas después de esa noche trágica. Además del apoyo económico a cada familia afectada, el gobierno federal también ha prometido que se entregarán algunos terrenos para que las personas que murieron puedan ser enterradas.
Recordemos que Tlahuelilpan es un pueblo tan pequeño que no tiene capacidad para enterrar a tantas personas. Mientras tanto, la oposición continúa declarando que la explosión fue resultado de una mala estrategia de seguridad del gobierno de López Obrador. El tabasqueño, en su defensa, invitó a las personas a solicitar apoyos de programas sociales para evitar saquear ductos abiertos.