Las 10 acciones de Ebrard para ayudar a mexicanos en Estados Unidos
El gobierno mexicano ha decidido que la presencia de sus elementos en Estados Unidos no será meramente burocrática. López Obrador quiere los consulados mexicanos en el país del pay de manzana tengan muchas más atribuciones y capacidad para atender las miles de quejas de nacionales en un país que últimamente se ha lanzado contra ellos. Para lograrlo, se ha creado un plan definido con diez acciones precisas.
Marcelo Ebrard, el actual canciller mexicano, aseguró que durante este nuevo gobierno no se va a dejar de lado a los mexicanos en el extranjero. En principio, se les ayudará al elevar las necesidades y solicitudes de los paisanos al primer eje de gobierno. Para lograrlo, se aliará con gobierno estatales y municipales, debido a que la mayoría de los mexicanos en Estados Unidos provienen de estados como Michoacán, Guerrero, entre otros.
Después, Ebrard señaló que el servicio exterior mexicano estará 100% capacitado para atender cualquier caso que surja. Recordemos que en administraciones anteriores se designó a políticos, académicos, empresarios o familiares como miembros de los consulados en Estados Unidos, por lo que hacía falta capacidad laboral para el cargo. La idea es que puedan atender de manera profesional y rápida a los grupos de mexicanos más vulnerables en este país.
Otra parte fundamental para defender a los paisanos es una buena asesoría y defensa legal. Marcelo Ebrard dejó en claro algo que el presidente ya había comentado: los consulados pasarán a ser también grandes centros de apoyo legal para los mexicanos que sean amenazados o perseguidos en una nación dominada por la extrema derecha de Donald Trump y sus seguidores xenófobos.
Pero no se ha dejado del lado el papel didáctico de los consulados nacionales. Por lo que se anunció que habrán proyectos y programas culturales en cada uno de ellos (recordemos que México mantiene 67 consulados en las principales ciudades de Estados Unidos). La misión es promocionar la cultura mexicana sin interrupciones. Además de proveer servicios de salud y educación, sin olvidar que pueden funcionar para promover el deporte entre los mexicanos en la nación del blues.
Una oferta más apunta a hacer de los paisanos entes más colaborativos con el gobierno mexicano. La idea de Ebrard es que haya un “desarrollo de mecanismos financieros para la participación de la comunidad migrante en los grandes proyectos de desarrollo del gobierno”. Aquí no queda claro si la idea será disponer de sus recursos o si está ligada a la fuerte cantidad de remesas que se generan en el país gracias al dinero que envían sus familiares desde Estados Unidos (una cifra de 33,000 millones de dólares en 2018).
El hecho de que los consulados mexicanos se encuentren en las principales ciudades de Estados Unidos puede dejar sin protección o asesoría a los nacionales que no viven en capitales yanquis. Para esto, el gobierno obradorista ya planea nuevos consulados móviles para que se atienda e informe a la mayor cantidad de personas posibles en poblados estadounidenses, en donde se han llevado a cabo algunas deportaciones masivas.
Una de las propuestas más grandes de López Obrador indican que en los consulados mexicanos se defenderán los derechos humanos de los nacionales, por lo que ya es oficial que las parejas del mismo sexo podrán contraer matrimonio en estos centros del gobierno mexicano (esto ante la homofobia imperante de algunos estados sureños de Estados Unidos, en donde abunda la presencia mexicana). Además, se prevé atención especializada en lenguas indígenas mexicanas para una mayor apertura con los nacionales en este país.
Por último, Ebrard dejó en claro que se generarán lazos de comunicación directa entre los mexicanos en el país del jazz y sus familias en las comunidades más alejadas del centro de México. La idea es facilitar comunicación entre ellos para evitar esas brechas largas de silencio entre una persona que decide ir a trabajar a otro país y sus familiares que lo esperan en silencio durante años.