Comunidades indígenas rechazan la construcción del Tren Maya
Las comunidades indígenas de la Península de Yucatán han saltado en contra del mega proyecto de infraestructura denominado «Tren Maya» de la próxima administración de Andrés Manuel López Obrador. Al mismo tiempo rechazaron cualquier resultado que se pueda obtener de la consulta que se realizará entre el 24 y 25 de noviembre. Recientemente fueron lanzadas las redes sociales oficiales del proyecto.
Comunidades indígenas se oponen al Tren Maya.
A través de un pronunciamiento conjunto, colectivos indígenas de la Península de Yucatán expresaron su desagrado a el Tren Maya pues consideraron que «ninguna persona fuera de la Península de Yucatán puede decidir sobre lo que se puede hacer o dejar de hacer». Así mismo, llamaron al presidente electo a prohibir a partir del 1 de diciembre cualquier tipo de subasta, autorización, cambio de uso de suelo o permiso relacionado al proyecto sin el previo consentimiento de los pueblos indígenas por dónde pasará el proyecto.
Desde la pasada administración hemos estado expectantes con respecto al megaproyecto Tren Maya, lo hemos seguido puntualmente y desde que se inició a hablar del mismo estamos atentos a su desarrollo. Manifestamos que desde ese momento lo desaprobamos y nos desagrada por cuanto que violentaba los derechos indígenas de los que somos sujetos y que están consagrados en nuestra Constitución Política.
Desilusionadas por la próxima administración.
Las comunidades expresaron su desagrado a el proyecto y dijeron sentirse desilusionadas por la nueva administración. Expresaron que desearían que el próximo gobierno reconsidere poner en marcha el proyecto del Tren Maya. Sin embargo, no guardaron esperanzas y aseguraron que nada cambiará y que la justicia nunca llegará a sus comunidades.
Con respecto a la llamada consulta, desde este momento rechazamos cualquier resultado que la misma tenga ya sea a favor o en contra. No es permisible que nadie, ninguna persona fuera de la Península de Yucatán pretenda decidir lo que se puede hacer o dejar de hacer en nuestros territorios, así como nosotros jamás intentaremos decidir lo que se hará con sus bienes, derechos y posesiones.
Las comunidades que firman el proyecto son representadas por las siguientes organizaciones: Prodiversa A.C, Red de Productores de Servicios Ambientales Ya’ax Sot’ Ot’Yook’ol Kaab A.C., el Colectivo de Comunidades Mayas de los Chenes, Muuch Kambal A.C., el Consejo Indígena de Atasta, Cladem Yucatán, Candelaria Campeche, la Sociedad Cooperativa Turística de Repobladores de Chiquilá, el Movimiento de Resistencia Civil y el Ejido de Conhuas de Calakmul, Campeche.
«Todo se ha llevado a nuestras espaldas.»
Las agrupaciones se oponen al proyecto en el sentido que este ya cuenta con licitaciones, trazos, presupuestos y fecha de inicio y a ellos no se les ha consultado en lo absoluto. Aseguran que se han enterado del proyecto gracias a los medios de comunicación y mencionan que ninguna autoridad se ha sentado a dialogar con ellos. Acusan al próximo gobierno de haber llevado a cabo el proyecto a sus espaldas.
La única información que tenemos es lo que los noticieros han transmitido y las filtraciones que nos han llegado. De manera oficial no hay autoridad alguna que se haya sentado a dialogar con nosotros a pesar de que la obra física pretenden asentarla en nuestro territorio; ni hablar de buena fe, esta no existe, todo se ha llevado a nuestras espaldas, y para estar en condiciones de que sea culturalmente adecuada en primer término quisiéramos que cualquier decisión que se pretenda tomar sea en presencia de nuestras representaciones y en nuestros territorios.
Posteriormente atacaron al proyecto pues dijeron «no está planeado para la gente común» y es «un proyecto turístico que sólo beneficiará a los pudientes y a los extranjeros». A razón de lo anterior dijeron que a ellos sólo les tocará verlo pasar pues no se consideró a ninguna comunidad dentro de las estaciones. Como ejemplo utilizaron el caso del Tren Chepe dónde aseguran «el desarrollo sigue pendiente».
Piden mayor acercamiento y comunicación.
Para Finalizar, dijeron que emprenderán las acciones que sean consideradas como necesarias para garantizar el cumplimiento de sus derechos. Así mismo, llamaron a AMLO a dialogar con ellos y no usar la consulta como una encuesta para «aceptar o rechazar el megaproyecto». Dijeron que, las consultas deben usarse como un mecanismo para el acopio y acercamiento de la información sobre las decisiones.
De igual manera dijeron estar en contra de cualquier afectación ambiental de la que pudieran ser objeto sus comunidades por la construcción del ferrocarril. Debido a esto, pedirán se realice de forma adecuada y correspondiente, la Manifestación de Impacto Ambiental y la Evaluación de Impacto Ambiental por un organismo independiente a la empresa que vaya a realizar el proyecto. De igual manera, solicitaron que se instale una misión de observación del Alto Comisionado de la ONU, CNDH o CIDH durante la realización. Exigen que la manifestación tenga una proyección a 40 años.