Ya lista la ley para hacer de México la tercer nación con marihuana totalmente legal
En un mundo lleno de prejuicios en contra de una planta, México quiere entrar de lleno a favor de su cosecha, siembra, uso, consumo y más. El día de hoy se presentará ante el legislativo mexicano la polémica ley morenista que busca legalizar por completo la marihuana lúdica y medicinal en todo el país. La gran madre del proyecto es Olga Sánchez. La mujer que fuera ministra mexicana y defensora de derechos humanos ha tenido meses para estructurar esta iniciativa que colocaría a México en un territorio que solamente conocen Uruguay y Canadá.
A poco menos de un mes para que López Obrador tome posesión como el primer presidente de izquierda en el país, su futura secretaria de gobierno pretende iniciar funciones ya con un proyecto sólido de legalización general de la cannabis en un país sumido en la violencia armada y el control de los grupos criminales ligados a la producción y venta de drogas. Recordemos que la guerra contra el narco iniciada por Felipe Calderón ha dejado más de 250 mil muertos y no ha detenido en absoluto la operación de los narcotraficantes.
Este reinado de terror pretende ser destruido en parte desde el terreno legal. Para Olga Sánchez es inevitable que México dé un paso enorme en la legalización lúdica de la marihuana. A su favor tiene la aprobación de López Obrador, Marcelo Ebrard, el aún titular del ejército mexicano, gobernadores, organismos internacionales, su partido completo, mayorías en ambas cámaras legislativas e incluso el apoyo de la ONU.
⚡️⚡️⚡️Jorge Aristóteles Sandoval, gobernador de Jalisco, celebró la postura de la senadora y próxima secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, respecto a la legalización, medicinal y recreativa de la marihuana. pic.twitter.com/U0TsRhHv3t
— Canal 44 (@CANAL44TV) November 2, 2018
Lo cierto es que durante los últimos dos sexenios México se ha convertido en el gran productor de marihuana ilegal en el continente, por lo que se pretende cambiar esta imagen para hacer del país una megaindustria de la cannabis legal aplicada en alimentos, medicamentos, bebidas, dispositivos relacionados, entre otras cosas. Por lo tanto, se vienen semanas de polémica derivadas de la presentación, discusión e inevitable aprobación de la iniciativa.
Olga Sánchez quiere más que una regulación. Su búsqueda es que la marihuana deje de ser la planta más satanizada del país, por lo que su iniciativa pretende el uso de la planta con fines médicos, lúdicos, científicos, de investigación, industriales y comerciales. Es por eso que los mexicanos estarán escuchando continuamente términos como THC o CBD, los principales componentes de la planta, y viendo cómo ciertos componentes de la planta se integran a productos como alimentos, postres, bebidas, medicamentos, tes, etcétera.
¿Qué incluye la propuesta?
Como lineamiento principal, no habrá manera de que un menor de 18 años acceda a la cannabis lúdica. En el caso de la planta para uso medicinal, se habrá de evaluar cada caso. Recordemos que en el país varios padres de familia cultivan ilegalmente la planta para ayudar a sus hijos con problemas médicos, enfermedades o síndromes. Se pretende “la protección de la salud pública, con especial énfasis en el interés superior del infancia y la adolescencia”.
Otra de las intenciones es terminan con la venta de marihuana ilegal, una práctica violenta que ha generado miles de muertos en el país gracias a la presencia armada de grupos criminales en varias zonas del país. En sierras norteñas y montañas del centro y sur del país, la siembra de marihuana ilegal ha sumido en la inseguridad a cientos de comunidades indígenas a merced de las atrocidades del narcotráfico. Recordemos que buena parte de la marihuana consumida en Estados Unidos es sembrada en Michoacán, Guerrero o Sinaloa.
Cada mexicano, además, podrá sembrar, cultivar, cosechar, preparar y transformar hasta 20 plantas de marihuana en su domicilio. Todo esto para consumo estrictamente personal, sin posibilidad a comercializar, y con cantidades que no rebasen los 480 gramos de cannabis anual. Para lograr todo esto será necesario solicitar un permiso al gobierno mexicano y enlistarse en un padrón anónimo, asegura la iniciativa consultada por el diario Milenio. En caso de que alguien coseche más de la cantidad permitida, el excedente será donado a la investigación científica de la planta.