Esposa y hermana de Emilio Lozoya investigadas por posible corrupción
Santiago Nieto está poniendo todos sus esfuerzos para sacar a México de la lista de países que no castigaron los sobornos de Odebrecht. La empresa carioca ganó contratos masivos desde que Enrique Peña Nieto llegó al poder y sus encargados han mencionado tratos directos con un priista de alto poder (en ese entonces): Emilio Lozoya.
Las autoridades de inteligencia financiera acaban de congelar las cuentas del itamita, lo que acerca a Lozoya a la justicia mexicana. Todo esto parecía imposible hace unos meses, cuando amparos y jueces locales determinaron que el priista no debía ser detenido por diversas razones. A pesar del cúmulo de evidencia, hacía falta de nuevo una investigación profunda liderada por Santiago Nieto.
Estos dos personajes tuvieron una fuerte riña en el sexenio pasado. Nieto era fiscal electoral, y Lozoya era titular de la petrolera mexicana. Cuando todos los datos apuntaban a que el PRI recibió sobornos de Odebrecht con Emilio Lozoya como intermediario, el fiscal fue despedido. Nieto prometió regresar para llevar ante la justicia al hombre que lo desprendió de su empleo, algo que ahora parece más que probable (después de 10 años de muerte política que han caído sobre Lozoya).
Transferencias sospechosas
Pero la inteligencia financiera mexicana ha encontrado a muchos más aliados para los supuestos desvíos que hizo Lozoya al frente de Pemex. Además de sus cuentas bancarias, se ha ordenado investigar las cuentas de su hermana y su esposa (Gilda Lozoya Austin y Marielle Helene Eckes, respectivamente). Todo esto para determinar si varios depósitos que se hicieron a sus cuentas fueron parte de la ilegalidad que hoy embarra al priista.
Las pesquisas dejan ver un avance considerable para dar con los responsables de Odebrecht en México. Esta empresa brasileña tiene a uno de sus dueños en prisión por sobornar a gobierno latinoamericanos, además de varios expresidentes y funcionarios del continente que aceptaron el dinero a cambio de contratos. En México se entorpecieron las investigaciones durante la era Peña Nieto, en donde varios priistas de alto rango estarían implicados.
Además de Lozoya y dos personas de su ciclo más cercano, se han congelado las cuentas de la siderúrgica más grande de México. Junto con todo este cúmulo de posibles involucrados, también se investigan a empresas con operaciones ilícitas como Casa Portella México, Yap Consultores, Yacani y Rancurello. Altos Hornos de México, la siderúrgica afectada, asegura que esta investigación es totalmente aleatoria y que no tienen qué ver con la corrupción de hace unos años.
Con información de Aristegui Noticias.