Castigan a la empresa que vendió armas usadas en el caso Ayotzinapa
Un tribunal alemán multó a la empresa Heckler & Koch por la exportación ilegal de armas hacia México, algunas de las cuales podrían haber sido usadas para la violencia ejercida contra los 43 estudiantes normalista en Ayotzinapa.
De acuerdo con un juez de la Audiencia Provincial de Stuttgart, la compañía alemana envío a México, entre 2006 y 2009, unos cuatro mil 700 fusiles, así como ametralladoras y municiones, sin el permiso necesario.
¿Dónde están las armas?
Las investigaciones indicaron que las zonas donde presumiblemente llegaron las armas fueron los estados de Guerrero, Chiapas, Jalisco y Chihuahua, zonas en que Alemania prohíbe la venta de sus municiones, debido a la falta de garantías de respeto a los Derechos Humanos.
Además, de que estas entidades no cuentan con un permiso de importación de armamento, por lo cual el tribunal condenó a Heckler & Koch a pagar una multa por casi 4.2 millones de dólares; además de darles libertad condicionada a dos de sus empleados.
Según los reportes, respecto a los ex empleados condenados se trata de un jefe de ventas y una administrativa; el primero deberá cumplir un año y 10 meses de libertad condicional y pagar una multa superior a 90 mil de dólares.
Asimismo, a la ex empleada, el tribunal le impuso una pena de un año y cinco meses de libertad bajo fianza y 250 horas de trabajo comunitario, mientras otros tres trabajadores, quienes también estaban acusados fueron absueltos, casi 10 meses después de haber iniciado su juicio.
Por su parte, la Fiscalía de Stuttgart indicó que los cinco acusados violaron en varias ocasiones las leyes alemanas de control de exportación de armas, al enviar rifles de asalto G36 y armas de fuego más pequeñas a México.
Castigan a Heckler & Koch
Antes este panorama, por medio de un comunicado, Heckler & Koch dio a conocer que el hecho de que no fuera juzgado ningún directivo por el delito era una arbitrariedad, al tiempo que agregó que cree que los jueces no han tenido en cuenta “la investigación y la plena cooperación” de la empresa hacia las autoridades.
En este sentido, Heckler & Koch indicó que entregó un informe de 100 páginas sobre lo sucedido a la fiscalía y que han realizado “cambios fundamentales para evitar riesgos lamentables en el futuro”.
La defensa de la empresa alemana dijo que la Secretaría de Defensa de México fue la encargada última de distribuir las armas en el país y que la parte mexicana había firmado un certificado de usuario final, por lo que los fusiles de asalto G36 no deberían haber llegado a esos lugares.
Vale indicar que esta sentencia llega en un momento poco oportuno, pues está abierto un debate sobre la venta de armamento alemán a Arabia Saudí, luego del fallecimiento de Jamal Ahmad Khashoggi, un periodista crítico con el régimen en Arabia Saudita, ocurrido con armas alemanas.
Con información de Forbes y el País.