Bolsonaro obliga a parejas gay a casarse antes del 31 de diciembre
A sólo unas horas para que Jair Bolsonaro, presidente electo de Brasil asuma la totalidad de sus funciones, decenas de parejas gay brasileñas se casaron antes de finalizar el 31 de diciembre, por temor a que el nuevo mandatario revierta sus derechos.
Una investigación del diario estadounidense The New York Times reveló la forma en cómo estas parejas lograron conseguir el dinero para los documentos y la fiesta en cuestión de días, con el apoyo de voluntarios y activistas.
Bodas antes del 31 de diciembre
Tras la victoria de Bolsonaro, quien se asume públicamente como un homofóbico, organismos como la Asociación de Juristas de Río de Janeiro recomendaron a las parejas del mismo sexo, casarse antes del fin de año.
Esto luego de que el futuro presidente de Brasil afirmara que defendería “el verdadero significado del matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer”, como una prioridad de su mandato.
Hecho que es factible, pues su partido político se convertirá en la segunda fuerza de la Cámara Baja, lo que abre la posibilidad de que el Supremo Tribunal Federal anule la legislación sobre el matrimonio igualitario, creada en 2013; aunque no está claro cuánto tiempo podría tomar este proceso.
De acuerdo con cifras de la Asociación de Notarios de Arpen, consultadas por el citado medio, el número de matrimonios igualitarios en todo Brasil aumentó 66% en noviembre.
Tan sólo en Sao Paulo, la ciudad más grande de Brasil, se realizaron 57 matrimonios de personas del mismo sexo en los primeros 10 días de diciembre, en comparación con los 113 que hubo en todo el mes de diciembre de 2017.
Colectivos apoyan a parejas gay
Pese a que muchas parejas no contaban con los recursos económicos suficientes para los trámites; asociaciones civiles y voluntarios se sumaron para realizar bodas comunitarias para hacer menos difíciles los gastos.
Según NYT, el apoyo social estuvo siempre con las parejas, pues desde pasteleros, planeadores de bodas, fotógrafos y DJs ofrecieron sus servicios de manera gratuita, para amenizar la celebración colectiva de estas parejas.
Sin embargo, la otra cara de la moneda está latente, pues el mayor temor de la comunidad gay brasileña es la retórica feroz de Bolsonaro, misma que podría dar pie a una nueva era de intolerancia e intimidación con el agravante de la violencia.
Esto luego de que diversos grupos conservadores en el país, han mostrado apoyo a la política de Bolsonaro, mediante intimidaciones verbales e intolerancia en espacios públicos en contra de la comunidad LGBT.
Tales prácticas son condescendientes con la ideología del próximo presidente, quien durante su campaña acusó a los gobiernos izquierdistas, de distribuir “kits de homosexualidad” en las escuelas, en referencia a los materiales educativos sobre sexualidad, que de acuerdo con Bolsonaro, son perjudiciales para los estudiantes.
Vale mencionar que el futuro presidente, durante su estancia en el Congreso, fue conocido por sus ataques contra mujeres, así como en contra de homosexuales y personas de color; pese a ello, logró la victoria al prometer detener la corrupción desenfrenada y los crímenes violentos en Brasil.
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