Dan 22 años de condena a cinco marinos por secuestro y asesinato
Se trata de una sentencia histórica para la defensa de los ciudadanos ante abusos de las fuerzas armadas. En el norte de México al menos cinco marinos secuestraron y asesinaron a un hombre de 33 años. Se trata de cuatro marinos y un capitán que operaron en Nuevo León y en donde desaparecieron a su víctima. Las autoridades judiciales dan 22 años de condena a cinco marinos que desaparecieron a un mexicano.
Con este castigo ejemplar se busca evitar los abusos a derechos humanos generados por parte de elementos de seguridad. Recordemos que las acusaciones de tortura, secuestro y más, por parte de las fuerzas armadas en años anteriores permanecen en su mayoría impunes. El nivel de complicidad en los abusos llegó al punto de que Felipe Calderón cambió los hechos para proteger a militares que violaron a una mujer indígena durante su gobierno.
Con más de dos décadas en prisión, los marinos habrán de pagar por la detención arbitraria de Humberto del Bosque. Después de la condena, los marinos y el capitán ya han apelado la decisión del juez para evitar pasar todos estos años en prisión. El cuerpo de Humberto fue encontrado dos meses después de haber desaparecido, junto a su auto, que también robaron los marinos involucrados.
“Se ordena a la Secretaría de Marina realice una declaratoria oficial en la que restablezca la dignidad, reputación y los derechos de la víctima directa, así como de las personas vinculadas a ella, seguido de una disculpa pública de la dependencia y de los sentenciados, que incluya el reconocimiento de los hechos y la aceptación de las responsabilidades”, señala la sentencia, apegada a la ley general de víctimas.
Todo indica que secuestraron a Humberto después de que tuviera una riña con sus vecinos en 2013. Los sujetos lo amagaron con un arma y después pidieron apoyo a estos elementos de la marina. En el momento de su desaparición, el padre de la víctima vio y reconoció a los elementos que después asesinaron a su hijo. La sentencia se da siete años después de los hechos ocurridos en el norte del país.
Con información de Proceso.