Un trabajador de Javier Duarte quiere dirigir la auditoría anticorrupción
El cargo es muy codiciado dentro del sistema de impartición de justicia en México. La Auditoría Superior de la Federación (ASF) es quizá el organismo más importante del sistema anticorrupción propuesto en este país, por lo que la designación de su próximo titular debería de hacerse un tema público y de interés nacional.
Al contrario, varias organizaciones civiles acusan que el proceso de designación para elegir al nuevo auditor anticorrupción nacional se hace en total silencio y de la manera más discreta posible. Dentro del proceso para elegir a la persona que dirigirá una de las instancias más importantes para la rendición de cuentas en México se encuentra un candidato bastante curioso.
Se trata de Iván López Fernández, el hombre que fue contralor en Veracruz durante la primera mitad del sexenio de Javier Duarte. De diciembre de 2010 a octubre de 2013, López Fernández fue el funcionario encargado de controlar los gastos de la administración pública veracruzana, tiempo en el que iniciaron los desvíos millonarios de Duarte.
Durante todos estos años, este contralor no detectó ni denunció ninguna anomalía en el accionar del ahora detenido exgobernador priísta de Veracruz. Y a pesar de que no se tienen denuncias o procesos en su contra, López Fernández busca dirigir una de las instancias anticorrupción más importantes de todo México.
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Lo cierto es que el proceso para elegir al nuevo director de la ASF ha sido bastante silencioso y hasta el momento, según datos del periódico Reforma, hay pocos candidatos. Uno de los principales es López Fernández y además se encuentran en la lista personajes como Raúl Sánchez Kabashi, actual secretario de Finanzas del gobierno de Puebla, Alberto González Hernández y Roberto Mazón Salgado.
Y es que la convocatoria apenas tiene unos días abierta y este domingo concluye con muy pocos candidatos a dirigir esta importante auditoría hasta 2025. Diversas ONG han denunciado el proceso de elección de un cargo tan importante. “La mayoría de las designaciones de estas instituciones se han pospuesto o se han llevado a cabo sin contemplar mecanismos de transparencia, rendición de cuentas, ni participación ciudadana”, comentan.
Hasta el 1 de diciembre se cerrará la convocatoria y todos los inscritos serán entrevistados un día después para validar sus currículos. Después, entre el 7 y el 9 del último mes de este año, la comisión de vigilancia de la ASF formulará un dictamen que será sometido a discusión en el pleno. Este proceso se hará a toda prisa ya que en la primera quincena de diciembre el país tiene que saber el nombre del nuevo auditor general.
Boletín de OSC: Proceso de designación del próximo titular de la ASF inicia a puerta cerrada https://t.co/10e1WywcXu
— Causa en Común (@causaencomun) November 21, 2017
Sobre López Fernández, Javier Duarte habló maravillas. El político veracruzano detenido llegó a comentar que Fernández «se ha desempeñado como un servidor público comprometido con esta tarea y deja bases firmes para las tareas por venir, y el camino para una administración que se ha caracterizado por su eficaz control y la transparencia en su actuar».
Según declaraciones de Claudia Corichi, secretaría de la comisión de vigilancia que evaluará el proceso de selección del nuevo auditor nacional, una persona como López Fernández no tiene la “autoridad moral” para encabezar una institución clave para vigilar y prevenir la corrupción en México, sobre todo en los próximos años. Lo cierto es que al gobierno mexicano le urge tener a una personas al frente de la ASF antes de que inicien las elecciones presidenciales del 2018.
