¿La posible vacuna del coronavirus será gratuita o con costo?

¿La posible vacuna del coronavirus será gratuita o con costo?

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Los gobiernos más poderosos del planeta están pisando aceleradores para encontrar una cura al covid-19. Esta historia activa involucra equipos especializados, meses de pruebas, plasma de personas recuperadas y miles de millones de dólares para dar con la respuesta. Si bien el coronavirus puede no ser vencido con medicamentos, ¿la posible vacuna del coronavirus será gratuita o con costo?

El país que más se ha acercado a una respuesta es China, una nación que ha presentado avances en una posible cura para el coronavirus. Estados Unidos también está enfocado en hacerse primero con la respuesta a una pandemia que acumula más de 3 millones de infectados. Si bien la vacuna podría estar lista en un año o más, el tema es cómo distribuirla. Algunas farmacéuticas se frotan las manos con la idea de venderla.

Pero Japón y la unión de países europeos concuerdan en que, en caso de encontrar la respuesta al coronavirus, se debería automáticamente de hacer gratuita la vacuna. La intención es que toda persona de cualquier nación, sin importar su alcance económica, pueda acceder a la cura. Hay 7,500 millones de euros en juego para dar con esta vacuna. Por lo tanto, privatizar o no la respuesta será clave en los próximos años.

El coronavirus podría permanecer en el planeta y las personas tendrían que utilizar prácticas de cuidado para no contagiarse de forma permanente, dio a entender la OMS ante la falta de avances nítidos de una vacuna eficiente. China, en donde se detectaron los primeros contagios masivos, aseguró hace unas semanas que también harían de la vacuna un “bien público mundial”, en caso de dar con la respuesta.

Pero del otro lado de la moneda están los privatizadores. La empresa Johnson & Johnson declaró hace unas semanas que están cerca de tener una vacuna efectiva contra el covid-19. En este caso, la intención es venderla primero al gobierno estadounidense y el resto, en una clara actitud de capitalización de la salud. Es decir, quien tenga el dinero suficiente podrá sanar, el resto está a su suerte.

Poco a poco las voces del sector privatizador farmacéutico se han quedado solas en su intento por controlar la respuesta.

Con información de El Universal.