Fallece otro niño migrante que se encontraba bajo la custodia de EU
Un niño de 8 años de edad de origen guatemalteco que se encontraba bajo la custodia de la Oficina de Inmigración y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos, falleció la madrugada del 25 de diciembre, luego haber presentado “signos de una enfermedad potencial”.
De acuerdo con el reporte, se trató de un niño migrante de 8 años quien previamente había sido detenido junto con su padre, luego haber cruzado la frontera desde México, siendo el día lunes cuando comenzó a mostrar signos de la enfermedad.
Las autoridades señalaron que el menor y su padre fueron trasladados al Centro Médico Regional Gerald Champion en la comunidad de Alamogordo, del estado de Nuevo México.
Según el reporte de la CBP, los síntomas que presentó fueron nauseas y vomito, y fue diagnosticado con fiebre y gripe, por lo que fue puesto en observación durante 90 minutos y posteriormente dado de alta, con un tratamiento a base de amoxicilina e ibuprofeno.
Sin embargo, más tarde el menor fue llevado de nueva cuenta a la clínica debido a que siguió presentado vomito y nauseas, y tiempo después se reportó su muerte.
Ante este hecho, la CBP indicó que el niño murió durante las primeras horas del martes 25 de diciembre, asegurando que la causa de su muerte aún se desconoce, por lo que se llevará a cabo una investigación que esclarezca el deceso.
La segunda muerte de un niño en custodia de EU
La muerte del menor de edad, de origen guatemalteco en custodia de las autoridades estadounidenses, ha ocasionado nuevas críticas a la política migratoria del presidente Donald Trump, debido a que inicios de diciembre otra menor de edad también falleció después de haber sido detenida por la Patrulla Fronteriza.
Se trató de Jakelin Call Maquin, de 7 años, también de origen guatemalteco, quien murió el pasado 14 de diciembre al sur de Nuevo México.
Los Agentes de Seguridad Interior señalaron que tras la detención de la menor y su familia, sus padres nunca dieron cuenta del estado de salud de la niña, señalándolos como “parcialmente” culpables de su muerte.
En un comunicado el Departamento de Seguridad Nacional ha reportado el aumento “dramático” de los niños no acompañados y las unidades familiares que llegan a la frontera sur de manera ilegal o sin autorización.
“De acuerdo con la ley existente, estas personas permanecen en instalaciones federales en espera de ser deportadas o liberadas en el interior de Estados Unidos con un aviso de comparecer en una audiencia en la corte. Durante su detención, reciben exámenes médicos y tratamiento adicional según sea necesario”.
De acuerdo con información del diario The New York Times, los centros a donde las familias migrantes y los menores no acompañados son llevados, se encuentran sobrepobladas y fueron diseñadas para albergar a adultos.
El diario asegura que los trabajos de dichos centros conocidos también como “hieleras”, se han convertido en todo un “desafío” para los encargados de cuidar a los menores y a las familias, sumado a que los migrantes permanecen más de 72 horas en las instalaciones.
“Estas instalaciones no son un lugar para un niño, ni siquiera para un niño sano… Las condiciones en las cuales estos niños están siendo retenidos son verdaderamente impactantes.”
Con información de la Agencia AP y Aristegui Noticias