Procuraduría inicia investigaciones en 40 edificios colapsados
La Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México abrió 40 investigaciones penales de los edificios que se cayeron en la capital del país por el terremoto de 7.1 grados del 19 de septiembre pasado.
Sin embargo, en la ciudad existen mil 500 edificios que podrían colapsar en los siguientes días por los daños que sufrieron durante el sismo y que ahora están en riesgo por las vibraciones generadas del tráfico cotidiano.
Este martes, el titular de la PGJ, Edmundo Garrido, explicó que el principal delito que se persigue es el fraude y las investigaciones están centradas en este tema, ya que las constructoras pudieron vender edificios que no cumplían con los estándares mínimos de calidad, además de haber utilizado materiales defectuosos.
«Son carpetas que estamos iniciando por cada uno de los inmuebles. Se están iniciando por fraude específico y por posible responsabilidad de directores, responsables de obra o corresponsables”, dijo el funcionario.
El terremoto de la semana pasada dejó ya 198 personas fallecidas en la Ciudad de México. La mayoría de estas víctimas murieron en inmuebles con más de 30 años de antigüedad, previo a que se modificaran las normas de construcción.
El sismo también provocó derrumbes y daños en inmuebles nuevos que ya no se pueden habitar. En este caso ningún edificio construido después de 1990 —cuando ya se habían reforzado las normas de construcción del país— debió caerse o sufrir daños más allá de sus acabados, explicó Luis Enrique Rodríguez, perito avalado por Protección Civil.
Delegación denuncia constructoras
Aunque los especialistas insisten en que los edificios nuevos no tenían que sufrir daños considerables, los edificios ubicados en Zapata 59 y Bretaña 90, en la delegación Benito Juárez, se cayeron y tres personas murieron en los derrumbes.
Los dictámenes emitidos por el gobierno delegacional afirman que las empresas Canada Building Systems de México y Dijon SAPI de CV utilizaron materiales de baja calidad.
“No vamos a permitir que esto quede impune y apoyaremos a los afectados para que se sancione a los responsables y se repare el daño”, aseguró Christian Von Roerich, jefe delegacional de Benito Juárez, al presentar la denuncia penal ante la PGJ.
De igual manera, la delegación también denunció a los Directores Responsables de Obras (DRO) que supervisaron y autorizaron ambas construcciones, ya que en el edificio de Zapata se utilizaron materiales de mala calidad y modificaron la obra original.
En el caso del inmueble de Bretaña, el delegado señaló que los desarrolladores “se fueron por la libre”, pues ni siquiera tramitaron la manifestación de construcción ante el gobierno delegacional, a pesar de que ellos también están pendientes de las nuevas obras y reciben las denuncias vecinales de las edificaciones que se inician.
Otros mil 500 en riesgo
Luis Felipe Puente, coordinador de Protección Civil, explicó que ya se revisaron ocho mil edificios en la Ciudad de México, de los cuales mil 500 están en riesgo de colapsar.
El problema, añadió el funcionario, es que hay edificios que no sufrieron daños y se pueden habitar, pero colindan con inmuebles que pueden caerse en cualquier momento, por lo que estas personas tampoco no pueden regresar a sus hogares.
Mientras se atiende la emergencia con este sector de la población que ya fue desalojado de su domicilio, Protección Civil seguirá revisando 11 mil edificios más en la capital del país, para descartar que haya otros en riesgo de caerse.
Con información de Reforma, Excélsior y El Universal
