Se destapa la cañería: 6 gobiernos más desviaron recursos para el PRI
Pocas veces se ha visto que un presidente saliente en nuestro país se blinde legalmente para evitar ser arrestado. Generalmente las transiciones son meros acuerdos político-económicos que generar seguridad y tranquilidad en los gobiernos salientes. Para este año, la crisis que rodea a Enrique Peña Nieto no le deja dormir tranquilo. Él, su gabinete y los líderes de su partido ya arrastran acusaciones severas de corrupción.
Hace unos meses se descubrió un plan elaborado desde la alta jerarquía priista para saquear recursos del estado de Chihuahua, provenientes de la secretaría de hacienda. En este tema que aún se investiga se perfilan como culpables a César Duarte, Manlio Fabio Beltrones y Luis Videgaray. Entre los avances de la investigación se apunta directamente al peso pesado del priismo nacional: Enrique Peña Nieto. Ahora, se sabe que este esquema se repitió en al menos seis estados gobernados por el PRI.
La noticia es una bomba que cae directamente encima del partido que aún tendrá el poder durante nueve días. El PRI nacional ya estaba blindando a sus perfiles más poderosos en el tema Chihuahua cuando Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) ha develado que se usaron empresas fantasma para desviar millones de pesos para el partido más antiguo de México. Se trata del Estado de México, gobernado por Eruviel Ávila; Durango, Sonora, Colima, el congreso de Morelos y la delegación de Milpa Alta.
Todos ellos desviaron recursos a favor del PRI en 2016
Si con el caso Chihuahua ya sudaban frío los priistas, estos nuevos casos parece que terminarán por abrir un proceso que podría llevar al arresto de Manlio Fabio Beltrones, el entonces presidente nacional del PRI. Además, también se apunta en todos los casos a la secretaría de hacienda, la responsable de expedir los recursos millonarios y encabezada por el gran amigo del presidente, Luis Videgaray. Ambos han negado en todo momento estos desvíos colosales.
El problema para los priistas es que el futuro presidente de México ha prometido un referéndum nacional para ver si se actuará en contra de los expresidentes del país y sus gabinetes. De resultar aprobada la consulta, todo indica que sí, Luis Videgaray y Enrique Peña Nieto tendrán un futuro inminente ante la justicia. El presidente asegura que no tiene nada qué esconder y que seguirá viviendo en el Estado de México, uno de los lugares en donde se desviaron recursos a favor de su partido. Videgaray promete no seguir en la política, pero no ha declarado si saldrá del país al entrar el nuevo gobierno.
Los datos de MCCI revelan que desde Chihuahua, la tierra del escondido César Duarte, se desviaron 250 millones de pesos. Este dato no solamente lo menciona este medio independiente, también lo confirma la auditoría superior y se sabe de que el gobierno y el congreso morelense le dieron 400 millones de pesos más al PRI, el partido más golpeado después de las elecciones de julio 2018. El escándalo pega justo cuando el priismo buscaba cómo reponerse de la debacle electoral y la pérdida de credibilidad después del sexenio peñista.
Para realizar estos saqueos, el PRI aplicó su receta personal basada en usar empresas fantasma. Incluso declaraciones de detenidos sobre el caso aseguran que desde la base nacional del PRI se prometió actuar, ya que estas empresas “estaban blindadas por parte del SAT”. El segundo estado que más desvió recursos a favor del partido fue Durango, gobernado por el priista Jorge Herrera, con 230 millones de pesos. Luego operó de la misma forma la única gobernadora del PRI, la sonorense Claudia Pavlovich, que dio 140 millones a su partido. Ella podría enfrentarse a un posible juicio político por el derroche de recursos en Sonora.
El otro implicado es un invitado inesperado. En la fiesta de saqueos priistas se encuentra el académico itamita José Ignacio Peralta, que aún gobierna en Colima y que le dio al tricolor 15 millones de pesos usando las famosas empresas fantasma. Este esquema de saqueo se dio a conocer gracias a la investigación de MCCI y Animal Político en el caso que llevó a prisión a Javier Duarte.
Pero no todo el saqueo fue desde acuerdos con los gobernadores tricolores. El congreso de Morelos, de mayoría priista, destinó 16.4 millones de pesos para su partido usando a estas empresas inexistentes. Y desde la Ciudad de México también se operó para beneficiar al partido priista usando dinero emitido por la Secretaría de Hacienda. Todo se dio desde la delegación de Milpa Alta, en donde gobernaba Jorge Alvarado, un hombre cercano a Eruviel Ávila y un elemento a favor del PRI capitalino. Las empresas fantasma que más resaltan en estos saqueos son SINNAX, FUTURA, FAGA, SISAS y SAMEX.
Mira toda la información en esta investigación de Mexicanos Contra la Corrupción.