Se tambalea la verdad de Yndira Sandoval, pero llevará su caso hasta CIDH

La verdad que sostiene Yndira Sandoval, activista y defensora de los derechos humanos y la mujer, frente a los medios de comunicación y redes sociales, sobre su supuesta violación y tortura psicoemocional durante un arresto en el municipio de Tlapa, Guerrero, se tambalea.

La presencia de dos videos en donde se puede ver y escuchar a Sandoval, en las horas de su arresto, en aparente estado de ebriedad, cantando e insultando a los policías, ha sembrado serias dudas al respecto de la cruzada que ha iniciado a través del hashtag #MeViolóElEstado.

Circula video del momento de la detención de la activista Yndira Sandoval en Tlapa, Guerrero https://t.co/h7qc0PpEwD pic.twitter.com/Kp7FWj6n88

— EjeCentral (@EjeCentral) October 24, 2017

https://twitter.com/EjeCentral/status/922649693984665600

Claudia Juárez Gómez, la presunta agente que violó a Sandoval durante el arresto, habló pronto para los medios, y a través de sus redes sociales, y negó categórica y totalmente los cargos que Sandoval le imputa. Afirmó ser madre, ser también mujer, e incapaz de las acciones de que se le acusa.

Dijo en entrevista para la televisión: “No se me hace justo que ella invente ese tipo de cosas de tal gravedad; yo también soy mujer, yo también soy madre de tres niños, yo soy padre y madre para mis hijos, lo único que hace es un día de peda y no asumir su responsabilidad de alterar el orden público”.

Agregó: “Ese día me encontraba en la comandancia y me pidieron que atendiera un incidente en la clínica San Antonio local, donde estaban dos personas alterando el orden en estado de ebriedad; la señora que ahora conozco como Yndira Sandoval, alterada, exigió que bajara a su amigo de la unidad porque ella era una activista, feminista, luchadora de derechos humanos y tenía el poder de que bajara a su amigo. Ella de forma grosera me dijo que me callara que era una pendeja, que yo no era nadie para decir nada”.

La conducta de Sandoval puede apreciarse en los videos. Al respecto, la activista ha dicho que pide perdón por su conducta, pero que encontrarse en estado de ebriedad no justifica una agresión sexual. Además, dijo conocer ya la existencia de esos videos, pero que siguió adelante en sus alegatos pese al escrutinio que caería sobre su persona.

“Me equivoqué con la policía, pero yo venía de un proceso de estar sometida, golpeada, torturada, nada lo justifica; y los videos donde estoy insultando a la policía no deben desvirtuar las denuncias por violación y tortura, pues nada justifica que una mujer en estado de ebriedad sea ultrajada”, dijo para Grupo Radio Fórmula.

Claudia Juárez, no obstante, asegura ser inocnente: “Nunca entré a la celda, ella entró sola: se sentó, se rió y me dijo: te vas a arrepentir, pendeja. Yo soy inocente, nunca lo toqué. Yo lo único que quiero es que se limpie mi nombre, y por eso estoy dispuesta a testificar”, dijo en entrevista para W Radio.

Entre tanto, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) ya tiene abierto un expediente de investigación para el caso. En conferencia de prensa, Luis Raúl González Pérez, presidente de la Comisión, dijo: “ya tenemos un expediente de investigación abierto, es un expediente que se abrió desde las horas posteriores a la denuncia que hizo Yndira Sandoval; está integrado con objetividad, neutralidad y con perspectiva de género. Estamos, desde luego, atendiendo y conociendo el asunto, y como en todos los casos, la CNDH se pronunciará en los términos que arrojen las evidencias, que serán recabadas de forma objetiva e imparcial”.

Para la activista, no obstante, esto no ha sido suficiente, pues en conferencia de prensa, el día de ayer, en el Centro Nacional de Comunicación Social (CENCOS) advirtió que escalará su denuncia hasta la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ya que no confía en las instituciones y autoridades mexicanas.

Durante la conferencia, detalló que su caso los lleva la Fiscalía Especial para Atención de Delitos cometidos Contra Periodistas, así como por la Procuraduría General de la República (PGR). “Pero yo no confió en la Fiscalía de Guerrero, y no tanto en la PGR, por eso he decidido llevar mi caso hasta las instancias internacionales”.

El caso ha abierto algunos detalles oscuros; el día de ayer, Marco Levario Turcott, director editorial del medio Etcétera, escribió sobre el vínculo político que existe entre Yndira Sandoval y Claudia Sheinbaum, delegada de Tlalpan. Según sus investigaciones, la activista trabaja para la delegada operando una estructura que construyó cuando laboraba en Inmujeres, de la Ciudad de México.

Sandoval, afirma, no ocupa un cargo formal en la Delegación de Tlalpan, pero colabora con ella y cobra a través de un fondo de seguridad de recursos federales, que sirven para contratar a organizaciones que trabajan a favor de la prevención de la violencia en las colonias de Tlalpan.

No es posible decir que todos somos Yndira #OpiniónDe @hdemauleon https://t.co/pX5XBAUBAv

— El Universal (@El_Universal_Mx) October 26, 2017

El vínculo de Sandoval con Sheinbaum, se vuelve importante por dos razones, afrima Turcott; una: que Sheinbaum será muy probablemente la candidata de Morena a la jefatura de gobierno de la Ciudad de México, y dos: el silencio que han guardado sobre el caso todas las militantes feministas del PRD y de Morena.

Según Turcott, los testimonios extra oficiales que ha podido recabar en los militantes de ambos partidos, y que pidieron permanecer en el anonimato, expresan indignación y total desacuerdo con la activista Yndira Sandoval. “Lo más indignante de esto es que Yndira trivializa la defensa de los derechos humanos y de las mujeres”. Según el texto de Trucott, en su debido momento, ambos partidos harán un severo cuestionamiento a la activista sobre su conducta y el caso.