César Duarte ya no se pudo amparar para evitar ser detenido
El que fuera gobernador priista en un estado plagado de desvíos vive días complejos. Escondido en Estados Unidos y agotando recursos para evitar presentarse ante la justicia mexicana, César Duarte ya no se pudo amparar para evitar ser detenido. Sus recursos se agotan y las órdenes de aprehensión se incrementan.
César Duarte suma tantas acusaciones que resulta complejo entender cómo es que sigue libre. Dejó al estado de Chihuahua sumido en deuda y prácticamente hay evidencia de saqueos, robos y desfalcos en cada día de su administración. El priista se salvó durante años con un buen equipo legal, pero su último amparo fue negado y la fiscalía mexicana ya apunta todo para detenerlo formalmente.
Se le acusa, entre otras cosas, de desviar al menos 379 millones de pesos cuando fue gobernador del estado norteño. El priista huyó rápidamente a Estados Unidos, particularmente a Texas, en donde vive con lujos y alejando poco a poco a la justicia. Hasta el momento se sabe de diez amparos que ha solicitado el exgobernador, la mayoría de ellos sin mucho éxito.
El caso del Duarte norteño es complejo, ya que hay más de veinte órdenes de aprehensión en su contra y de alguna forma sigue libre en el extranjero. En una etapa en donde el gobierno mexicano ha avanzado para detener a priistas como Javier Duarte o Emilio Lozoya, el caso del chihuahuense brilla por una falta clara de capacidad para detenerlo. El gobierno del panista Javier Corral ha enfocado todas sus fuerzas en capturar al priista.
El PRI sabe que César Duarte es uno de sus elementos más polémicos, por lo que sus directivos evitan hablar de todo lo relacionado con su gobierno y la etiqueta de miembro del “nuevo PRI” que tanto presumía Enrique Peña Nieto, cuando estaba en el poder. Y es que buena parte de los gobernadores tricolores de esa época están señalados por posible corrupción.
Duarte también se menciona en el caso Chihuahua,un sistema de desvíos en donde resuenan nombres como de peso como el de Luis videgaray, Manlio Fabio Beltrones y el del mismísimo Enrique Peña Nieto. Este caso en particular es el que más deja ver lo organizado que era el saqueo de recursos por parte del PRI federal y las células del PRI estatal, en este caso el PRI Chihuahua.
Con información de Proceso.