México alza la mano para darle asilo político a Evo Morales
La política boliviana acaba de dar un giro rotundo hacia la derecha. Las fuerzas armadas han exigido al presidente que desista de ampliar su mandato ante una avanzada de violencia que se venía venir en las calles. Ante estas amenazas, Evo Morales ha decidido renunciar a la presidencial y junto con buena parte de su gabinete ya buscan asilo político.
México, a través del canciller Marcelo Ebrard, ha levantado la mano para recibir al político sudamericano y su equipo. Desde el día de ayer, cuando la OEA desconoció el triunfo de Morales y este convocó a nuevas elecciones presidenciales, el canciller mexicano ya había ofrecido cabido al boliviano en nuestro país. Ebrard también dejó en claro que el gobierno está atento a los 10,000 mexicanos que viven en Bolivia.
López Obrador aseguró que respetarán la decisión de este país, pero siempre con apertura a recibir a Evo Morales. Después del triunfo del tabasqueño en las presidenciales del 2018, fue precisamente el presidente de Bolivia uno de los primeros en felicitarlo. Además, con la victoria de la izquierda en Argentina, Evo y Obrador estaban encabezando un resurgimiento de la izquierda en el continente.
Iba rumbo a Argentina
Con la promesa de evitar un baño de sangre a los bolivianos, Evo ha ido en el avión presidencial al norte de su país. Fuentes de su país aseguran que estaba por salir rumbo a Argentina, pero las declaraciones de Marcelo Ebrard lo anuncian ya como un político exiliado en territorio mexicano. López Obrador aplaudió que se convocara nuevamente a elecciones para extender un mandato más, algo que ahora ha sido frenado por la milicia.
Con la salida de Evo Morales de Bolivia, el país quedaría a mano del derechista Luis Camacho. Este personaje es un ultraconservador que hoy mismo ha subido una foto con una biblia encima de la bandera boliviana, arrodillado dentro de la Casa de Gobierno (en donde horas antes despachada Evo Morales como presidente electo). La OEA acusó que la última elección estaba plagada de errores, pero los militares presionaron para sacar a Evo.
