Peña y Calderón perdonaron 3,700 millones a titanes de la comida chatarra
El SAT soltó una lista de personas beneficiadas por gobiernos en materia fiscal. Estos perdones de impuestos no solamente aseguraron las fortunas de las familias más poderosas de México, también fueron un apoyo total para empresas que claramente están dañando la salud de los ciudadanos.
En los sexenios de Felipe Calderón y Peña Nieto, las empresas de comida chatarra lograron grandes perdones de impuestos que los ayudaron a colocarse como las marcas más consumidos en un país plagados de obesidad, diabetes y problemas alimenticios. En total, los dos sexenios ayudaron con 3,769 millones de pesos en perdón de impuestos a empresas como Bimbo, Nestlé, Ferrero, Lala, Herdez, entre otras.
Todo esto a costa de que millones de mexicanos padecieron las consecuencias de haber consumido postres, bebidas y productos cargados en azúcar, grasas saturadas y sodio. Actualmente, el 32% de los mexicanos (muchos de ellos menores de edad) padecen de problemas de salud derivada del consumo de alimentos chatarra. Durante los sexenios del PAN y el PRI, los etiquetados fueron minimizados para no decirle a la gente qué estaba comiendo.
Vicente Fox abrió el camino
La condonación de impuestos fue una práctica común durante la era PRI, algo que continuó sin traba alguna desde la llegada de Vicente Fox. Incluso fue el panista el que más ayudó a que empresas como Coca-Cola estuvieran disponibles en cada rincón de México (incluso en zonas de pobreza en donde ni siquiera llega agua potable). Otras empresas beneficiadas por estos perdones fiscales con Colgate-Palmolive, Bacardí, La Costeña y Peñafiel.
El medio SinEmbargo se dio a la tarea de recopilar los montos, empresa por empresa, que el gobierno mexicano impidió que entraran en las arcas públicas. El gran premiado fue Grupo Lala, con 2,787 millones de pesos en impuestos que no tuvo que pagarle al sistema tributario. Las siguientes empresas que más fueron apoyadas son: La Costeña, con 821 millones; Peñafiel, con 78 millones, y así, hasta llegar a Bimbo y Nestlé (que se libraron de pagar 2.4 y 2 millones de pesos al SAT, respectivamente).
Con esto queda claro que ambos sexenios operaron principalmente para beneficio de grandes empresas y familias poderosas en México, antes que en el resto de la sociedad. Felipe Calderón se lavó las manos sobre este tema, comentando que él jamás decidió quién habría de ser beneficiado con los perdones fiscales. Peña Nieto ni siquiera ha hablado sobre el tema. La última vez que se vio públicamente al priista llevaba puesta una peluca.
Con información de SinEmbargo.