Miente Peña Nieto, la vaquita marina sigue en peligro de extinción

En el Sexto Informe de Gobierno (2017-2018) Enrique Peña Nieto habló de varias acciones que se tomaron en su sexenio para proteger a la vaquita marina, pero omitió que aún así esta especie continúa en peligro de extinción. Aunque se hayan gastado recursos federales en su protección, los hechos indican que hay menos vaquitas marinas de las que había cuando inició su sexenio.

La vaquita marina es endémica del Mar de Cortés y se encuentra en riesgo inminente de extinción. Más del 70 por ciento de la población desapareció, de acuerdo con estadísticas de organizaciones extranjeras y nacionales, reportó Sin Embargo. El informe destacó el establecimiento del Programa de Conservación, Protección y Recuperación de la Vaquita Marina (Vaquita CPR), además de otros esfuerzos por erradicar la pesca ilícita en el Golfo de California.

A pesar de esto, Greenpeace México destacó que: «en esta administración hemos llegado a un declive del 72 por ciento en la población de esta especie endémica que prácticamente está extinta«. Miguel Rivas, miembro de esta organización dijo a Sin Embargo que: «las cifras oficiales hablan de miles de millones de pesos invertidos, pero la realidad es que murió más del 70 por ciento de la población de la vaquita», aseguró que aunque se haya invertido dinero no hubo una preocupación real por su protección y las cifras lo demuestran.

El gobierno de Donald Trump prohibió la importación de camarón, chano, sierra y curvina que provenga del hábitat de la vaquita marina para detener la disminución de esa especie. «Según la ley estadounidense de protección a los mamíferos marinos, si un país con el que Estados Unidos tiene intercambio comercial no cumple con medidas equiparables para la protección de los mamíferos marinos, puede establecer sanciones comerciales y es el caso de la vaquita marina», explicó Olivera Bonilla, biólogo marino y representante del Centro de la Diversidad Biológica (CBD).

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«Desde Greenpeace no estamos de acuerdo con este tipo de medidas porque creemos que afectan a los pescadores que son quienes más han sufrido la problemática de la vaquita. Debería haber más integración de ellos en las soluciones, más que prohibirles o sacarlos del mercado«, dijo Rivas. La pesca es un problema ya que las redes de enmalle han ido mermando la población de la vaquita ya que mueren atrapadas.

Se debe acabar con el tráfico de totoaba

Otro de los principales riesgos es el tráfico de totoaba, un ejemplar marino endémico de esas aguas, ya que su buche se comercializa hasta en ocho mil dólares y las vaquitas se quedan atrapadas en estas redes. El Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita (CIRVA) mostró en febrero del año pasado que solo quedan 30 vaquitas marinas en aguas mexicanas.

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Olivera Bonilla dijo que es necesario acabar con el tráfico ilegal de totoaba en el Alto Golfo, este es el verdadero reto que tendrá que enfrentar el nuevo gobierno. Además se deben prohibir las redes en esa zona e implementar más monitoreo. De no realizar esto la vaquita podría quedar extinta para el año 2021.

«Hasta la fecha, el gobierno de México no ha prohibido permanentemente todas la redes agalleras en el hábitat de la vaquita, a pesar de repetidas recomendaciones de los científicos y la evidencia de que el uso de las redes de enmalle por cualquier pesquería, en o cerca del hábitat de la vaquita, sin lugar a dudas llevará a la extinción de la especie», concluyó Bonilla.

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