Lo sentimos Nuevo León, pero El Bronco te abandona por la presidencia
Al parecer el primer gobernador independiente en la historia de México ya no quiere seguir en ese puesto. Después de una victoria sorprendente, Jaime Rodríguez “El Bronco” fue nombrado gobernador de Nuevo León, uno de los estados más importantes del país. Logró un 49% de preferencia electoral, lo que demostró que la gente estaba lista para su mandato que se extendería hasta el 2021.
Apenas dos años después de ostentar el título de gobernador independiente, El Bronco ha decidido abandonar la confianza de millones de regios y lanzarse de lleno por la búsqueda de la silla presidencial. A pesar de su pasado priísta, la fuerza que actualmente gobierna el país, El Bronco decidió apostar por la candidatura independiente y vencer así a las fuerzas políticas tradicionales. Ahora, busca llegar a lo más alto del poder político de la misma manera.
El regiomontano ha anunciado que este sábado hará oficial su búsqueda por la presidencia de México. “Si de aquí a diciembre yo logro, en Nuevo León, un número mayor de firmas que el que conseguí para registrarme como candidato independiente en Nuevo León, estaré tomando la decisión de pedir licencia por seis meses para ir a la elección”, dijo.
Aún cuando en el 2015, criticaba fuertemente «El chapulineo«, como algo inmoral y que puedes hacerle eso al estado.
El chapulineo es inmoral, no puedes dejar abandonada tu responsabilidad, no puedes hacerle eso al Estado.
— JAIME RDZ EL BRONCO (@JaimeRdzNL) February 9, 2015
Para que el Instituto Nacional Electoral pueda concederle una candidatura independiente, cosa que cualquier mexicano debe lograr para el mismo objetivo, necesita reunir poco más de 800 mil firmas ciudadanas que lo avalen. De este número, Rodríguez asegura que la cifra puede aumentar hasta 1 millón de firmas, debido a que algunas pueden salir duplicadas y esto arruinaría todo el esfuerza. Además, se necesita contar con una asociación civil a nombre del solicitante, requisito que El Bronco ya tiene cubierto.
“Quiero intentarlo y quiero demostrar que la sociedad está cansada ya de los partidos políticos, y de los propios políticos”, señaló en entrevista con Ciro Gómez. Por lo tanto asegura que no tendrá a ningún político dentro de lo que podría ser su primera campaña presidencial. Reafirma entonces que su postura continuará siendo la de un candidato totalmente independiente, al parecer.
El Bronco forma parte del grupo conocido como los presidenciables. Se trata de figuras menores de la política nacional que no son consideradas como favoritas para ganar las elecciones presidenciales. Sin embargo, en las encuestas siempre figuran sus nombres aunque con poco porcentaje. Dentro de este grupo se encuentra el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles; el ex gobernador de Puebla, Moreno Valle; la ex esposa del presidente Calderón Margarita Zavala y el personaje del que hablamos, Jaime Rodríguez, El Bronco.
Todos ellos están en fase de prerregistro, ya que buscan aliarse de cualquier forma con partidos políticos o frentes para acceder a la campaña presidencial más costosa y competitiva de la historia de México. En el caso de El Bronco, como continúa fungiendo como gobernador, el prerregistro no lo obliga a abandonar el cargo.
En encuestas recientes, la mayoría de los neoleoneses están completamente en desacuerdo con que El Bronco abandone el cargo que acaban de darle para buscar la presidencia de una forma bastante anticipada. Tan solo un 26% está a favor de que su propuesta sin partidos sea llevada a un panorama nacional. Ante una caída en su popularidad por su ideología conservadora, misógina y homofóbica, las posibilidades de que El Bronco se vaya de Nuevo León con todo el apoyo de su ciudadanía parece algo imposible.
Por el momento el hombre de a caballo ha asegurado que tiene posibilidades de llegar a la silla presidencial. En algunas encuestas El Bronco ronda entre un 5 y 7% de preferencia electoral en el país, «me dan el doble de como yo inicié en Nuevo León. Entonces, hay una posibilidad», dice sonriente.
Estas elecciones presidenciales del 2018 podrían ser las primeras en donde un candidato independiente realmente compita contra las principales fuerzas políticas del país. Mientras el PRI se hunde entre casos de corrupción, el PRD y el PAN tienen que sumar fuerzas para poder atraer a los votantes y Morena lidera las listas de preferencia social pero mantiene el repudio del sector privado, las candidaturas independientes pueden tener todo esto a favor para despegar en un sexenio clave para México.