PRI y PRD quieren aliarse para seducirte en las elecciones 2021
Se trata de un posible matrimonio que hasta hace unos años resultaba imposible de pensar. El perredismo está prácticamente en coma y lo que queda del priismo busca desesperadamente aliados para sobrevivir a las próximas elecciones. Con crisis económicas y de militancia encima, el PRI y PRD quieren aliarse para seducirte en las elecciones 2021. Una última apuesta que no incluye al PAN, su aliado intermedio.
Las elecciones intermedias se acercan y no se ha logrado la meta del priismo por recuperar el 76% de militantes que los abandonaron después del sexenio de Enrique Peña Nieto. Del otro lado, el perredismo está desesperado por no perder el registro, por lo que la estrategia es aliarse con quien sea. Los estatutos internos del partido amarillo no les permiten aliarse con el PRI, por lo que ya evalúan cambiar su código genético.
Esta cambio sería el rompimiento total con las líneas de izquierda que forjaron al PRD en los ochentas. El PRI asegura que son grandes aliados y que estaría perfecto que fueran en unión durante el 2021, pero se les olvida que el perredismo nación prácticamente para criticar la línea política del tricolor. Además, varios fundadores del PRD fueron asesinados desde el poder por sus intenciones políticas.
Olvidando todo esto, el PRI y PRD parece que saldrán en alianza el próximo año, después de que Movimiento Ciudadano rechaza aliarse a ellos y de que el PAN busque acuerdos con el PRD solamente en ciertos estados. En las elecciones que vienen quedarán vacantes 15 gubernaturas y estarán en juego 21,368 cargos públicos. Justo ahí es donde priistas, panistas y perredistas quieren ganar representación inmediata.
La tirada de los grupos opositores es restarle poder a Morena, sobretodo en el congreso, en donde los guindas tienen mayoría contundente. La siguiente apuesta es generar coaliciones urgentes para hacerse con la mayor cantidad de gubernaturas y desde ahí buscar a un perfil popular para lanzarse por la grande en el 2024. Del otro lado, Morena ya piensa en dos nombres para suceder a López Obrador: su canciller y la jefa capitalina.
