Van 21 mil asesinatos en el último año de Peña Nieto en el poder
El mexiquense llegó a la presidencia con la idea de que habría de ser recordado por sus reformas estructurales, pero la realidad lo relaciona directamente con una pésima estrategia de seguridad. Enrique Peña Nieto no imaginó nunca que llegaría a sus últimos meses con un nivel de impopularidad récord y con cifras de hasta 21 mil asesinatos en lo que va del 2018.
Para rematar los malos resultados, la decisión de continuar con la guerra en contra del narcotráfico de Felipe Calderón ha manchado la imagen del priista, acumulando molestias entre la sociedad junto a casos de corrupción e impunidad. En 2017 el país reportó cifras récord de violencia: más de 25 mil carpetas de investigación abiertas por homicidio. Mientras el presidente invertía recursos en publicidad oficial para limpiar su imagen, las calles del país se llenaban de cadáveres.
En estos primeros nueve meses del 2018, de nueva cuenta se reportan cifras graves relacionadas con la violenta. Van 21,383 asesinatos en México y la cifra parece que no se detendrá en lo que resta del año. Con esto, podríamos hablar de un posible nuevo y trágico récord, ya que a este paso se podría romper la marca de los más de 25 mil asesinatos del año pasado. Y es que tan solo en junio de este año se registraron más de dos mil muertes relacionadas con la violencia.
Para el gobierno peñista ha sido prácticamente imposible derrumbar la pésima imagen que ha acumulado el mexiquense. En 2017, para silenciar la nota del año más violento en México desde los noventas, Peña destinó 10,725 millones de pesos a publicidad en radio, periódicos, televisión e internet. El dato más alarmante es saber que el presidente gasta un millón de pesos por hora para que se hable bien de su gobierno en todos estos medios de comunicación, privilegiando a ciertas televisoras y diarios impresos.
Otro dato destacable es el repunte de la violencia armada en estados como Guanajuato y Baja California, de fuerte raíz turística. Además, se suman territorios sumidos en la pobreza y la desigualdad como el Estado de México y Guerrero, en donde se siguen reportando altos índices de delincuencia. Es en estas zonas en donde se reportan los asesinatos más violentos, la mayoría de ellos con armas de fuego o armas blancas. En el total, van casi 15 mil muertes por bala en el país.
Ante estos números lamentables, el gobierno peñista ha tenido que salir a reconocer que sus estrategias de seguridad no han podido garantizar la paz. Durante las presidencias de Felipe Calderón y Enrique Peña, México ha visto morir a más de 250 mil personas de forma violenta. Muchos de los asesinatos están ligados al combate en contra de grupos criminales, pero también repuntan delitos como el feminicidio. En estados como Veracruz, Puebla o el Estado de México, prácticamente se asesinan a siete mujeres diariamente.
Mayo del 2018 es el mes con más repunte en asesinatos, registrando 3,876 muertes y más de 17 mil personas lesionadas por disparo u otras armas. En cuestión de feminicidios, julio fue el mes más sangriento, con 79 mujeres asesinadas en todo el país. Faltando algunas semanas para terminar el sexenio de Enrique Peña, el mexiquense entrega resultados lamentables en el combate al crimen y deja al nuevo gobierno una crisis de inseguridad y violencia nunca antes vista.
