El Partido Verde prometió ser libre ayer y hoy se entrega a Morena
Los aires de libertad le duraron poco menos de 24 horas al partido Verde Ecologista de México (PVEM). Ayer, en rueda de prensa y con aires de enjundia, su líder Arturo Escobar declaró que estaban terminando de tajo con más de diez años de sumisión ante los intereses políticos del PRI. La noticia dejó ver en palabras oficiales que el trabajo realizado por el partido del tucán siempre estuvo atado a los intereses del priísmo cuando fungía como mayoría en el congreso mexicano.
Para sorpresa de pocos, uno de los militantes del Verde más reconocidos, Jorge Emilio González, salió a declarar que después de separarse del PRI están a merced de las intenciones de López Obrador, es decir, de Morena. El partido de izquierda ha marcado historia al iniciar actividad en la 64 legislatura con mayoría en ambas cámaras legislativas. Después de sólo cuatro años, el grupo político formado por el tabasqueño parece imponer su ideología y en el PVEM lo saben.
Con esto, la supuesta independencia y libertad de los siete senadores y 16 diputados verdes quedará a merced de las decisiones de Morena. Y es que el partido del tucán ha mantenido la tendencia de pegarse a los partidos más fuertes prácticamente desde su creación. Con la intención de Vicente Fox para hacerse presidente en el 2000, los verdes estuvieron a su lado. En el 2012, con Peña Nieto aspirando a la presidencia, se unieron al PRI de inmediato. En las elecciones de 2018 fallaron al unirse a Antonio Meade, que terminó en tercer sitio.
Sabiendo la poca posibilidad que tienen para hacer cambios considerables en las cámaras legislativas, los partidos pequeños tienden a votar en bloques a favor de otras fuerzas políticas de más convocatoria. En el caso de la nueva legislatura, el Verde bien pudo unirse al PAN y al PRI para intentar restarle autoridad a las mayorías de diputados y senadores de Morena. En el caso de otro partido mediano como Movimiento Ciudadano, los naranjas también ya prometieron todos sus votos a las causas de Morena.
Ellos son los integrantes del Grupo Parlamentario del Partido Verde en el Senado de la #LXIVLegislatura @VelascoM_ @gabybenavides77 @veronicacamino @alelagunes @RaulBCCue
¡Síguelos y conoce su trabajo legislativo! pic.twitter.com/xVrEVaQxl2— Partido Verde_Senado (@VerdeSenadoMex) August 29, 2018
Pero para evitar desacuerdos con la línea federal del tabasqueño, Emilio González sentenció su estrategia para los próximos años. «Vamos a ser un partido independiente, responsable a colaborar con el próximo gobierno, con el gobierno del licenciado López Obrador, queremos que le vaya bien y le vamos a ayudar». Con esto, dejó en claro que no hay fuerza suficiente para operar de forma individual, como ha prometido el PRD o el PRI.
Lo cierto es que el partido Verde ha ido perdiendo fuerza y popularidad mientras más se aliaba en intereses con el PRI en el poder. En las elecciones de hace unos meses, el PVEM apenas pudo retener algo de poder en Chiapas, en donde aún gobierna Manuel Velasco (el único “ecologista” con un cargo fuerte en el país). Por lo tanto, se tuvieron que aliar con el PRI para no correr la suerte de fuerzas como Nueva Alianza o Encuentro Social que próximamente perderán su registro.
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Para el gobierno que iniciará en diciembre del 2018, Morena y López Obrador pretenden un cambio estructural que podrá crecer gracias a las mayorías de morenistas en ambas cámaras legislativas. En este escenario, los partidos menos privilegiados en escaños están analizando qué hacer con sus legisladores. El PRD está fragmentado y se ha declarado oposición ante los intereses de Morena. El PRI y el PAN continuarán con su visión neoliberal y las fuerzas como Movimiento Ciudadano y el Verde no se complican, apoyando a los guindas en todo sentido.
