Narcotráfico y crueldad animal, así luce un zoológico abandonado en Reynosa
Una denuncia anónima alertó a las autoridades en Reynosa, Tamaulipas, acerca de un zoológico privado abandonado, donde imperaba el narcotráfico y la crueldad animal.
Elementos de la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas catearon las instalaciones del Parque Recreativo y Ecológico Animal Adventure, donde encontraron el cadáver de un mono babuino, además de un cachorro de tigre que apenas podía sostenerse en pie.
Asimismo, se encontraron otros dos monos babuinos, cuatro tigres (uno de ellos blanco), dos pumas (negro y café), dos leones (albino y africano), un jaguar, cuatro águilas, dos monos araña, tres osos negros, un pitón, siete bovinos, siete caballos, 13 conejos, cuatro mapaches, tres llamas, dos búfalos americanos, tres avestruces, cuatro venados, dos perros huskys siberianos, un mapache blanco y 26 aves, entre los que se encuentran: guacamayas, guajolotes, pavorreales, gallinas de Guinea, palomas, gallos y pollos.
Otro de los hallazgos importantes fue el de 13 bolsas de plástico transparente, las cuales contenían en su interior hierba verde y seca, con las características propias de la marihuana y con un peso a determinar. Además, se encontró una bolsa trasparente con 10 bolsas de 5 x 3 centímetros, que contenía un polvo blanco, el cual al parecer es cocaína.
Ante este hecho, la Comisión Estatal para la Conservación y Aprovechamiento Económico de la Vida Silvestre en Tamaulipas, realizó una valoración inmediata a los animales encontrados para darles atención médica y un alojamiento adecuado, de acuerdo con su especie.
Por su parte, el gobierno tamaulipeco, por conducto de la Procuraduría General de Justicia, reafirmó su compromiso de combatir el delito y garantizar el respeto al Estado de Derecho y la conservación de la vida silvestre.
Vale resaltar que el hallazgo se dio, luego de que la Fiscalía recabara los requisitos necesarios para que autoridad jurisdiccional avalara la intromisión de la Policía Investigadora de Reynosa.
Es importante precisar que el lugar contaba con los permisos necesarios para laborar como zoológico privado, como lo consta una placa exhibida en sus instalaciones con fecha del 23 de junio de 2015, que le brindaba permiso durante tres años.