Cintas revelan la corrupción de Lozoya y Coldwell en la era Peña Nieto

Cintas revelan la corrupción de Lozoya y Coldwell en la era Peña Nieto

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El peñismo no duerme tranquilo desde hace varios meses. Sus rostros más conocidos están en una vacaciones perfectas fuera de nuestro país o han desaparecido y ni siquiera la justicia los encuentra. Los casos de corrupción, desvío de recursos y tráfico de influencias continúan apareciendo al punto de que se busca a Emilio Lozoya para enfrentar la ley. 

Buena parte del drama tricolor en el poder se debe a los pésimos manejos que se hicieron en Pemex. Desde que Emilio Lozoya llegó a la dirección de la petrolera, la corrupción incrementó en cifras sorprendentes. Ahora se sabe que el caso es tan grave que ya se investiga en Estados Unidos, justo la nación en donde el priista se escondió después de renunciar al cargo entre acusaciones de recibir sobornos. 

Los grabaron en secreto

Ahora se presentan cintas y datos clave para hundir la versión de Lozoya y su cercano, Joaquín Coldwell. Ambos habrían orquestado la quiebra de una empresa extranjera tan solo por no darle sobornos a este par cuando operaban a nombre de Pemex. Esta red de sobornos se une a la ya comprobada corrupción ejercida por la empresa Odebrecht en favor de Emilio Lozoya y el PRI, en general. 

Inversionistas de la empresa Oro Negro contrataron investigadores privados para grabar a Coldwell y Lozoya mientras solicitaban sobornos millonarios. Todo esto debido al “comportamiento aparentemente inexplicable de México hacia Oro Negro», señala el medio Univisión. Como secretario de energía, Joaquín Coldwell también habría impulsado esta exigencia de sobornos bajo la amenaza de debilitar a la empresa Oro Negro. 

Destruyeron a los que no aportaron

Por negarse a pagar esta extorsión, “México destruyó a Oro Negro”, señala la investigación. Este caso expone nuevamente la corrupción que generó Emilio Lozoya dentro de la petrolera mexicana. Para tener una reunión de pocos minutos con él, el priista cobraba entre 900,000 y 1.9 millones de pesos (50,000 o 100,000 dólares al precio de hoy). En caso de que pagaran, se les facilitaba la asignación de contratos con la empresa mexicana que hoy mantiene el título de la más endeudada del planeta. 

Los representantes legales de Emilio Lozoya han negado completamente estas acusaciones, asegurando que su cliente jamás pidió sobornos o extorsionó a empresas nacionales o extranjeras. Mientras tanto, el priista, que se dice inocente, es buscado internacionalmente para enfrentar la justicia mexicana. Con estas acusaciones, se hunde más su imagen sobre la crisis que generó en Pemex. 

Con información de Univisión.