Cada mexicano debe 66,000 pesos por las excesos de Peña Nieto
Las revisiones a los últimos meses del peñismo no ofrecen panoramas tranquilos. Poco a poco se ha dado a conocer que la deuda del mexiquense rebasa los 10 billones de pesos y que cada mexicano estará pagando durante décadas los derroches de la última presidencial del PRI. La suma hasta hace unos días era de casi 38,000 pesos de deuda por mexicano, algo que se ha elevado bastante.
Los últimos datos señalan que el priista gastó más de lo esperado y elevó la deuda nacional en un 46%. Enrique Peña ya había pasado a la historia como el mandatario que hereda la deuda externa más grande en el país. Ahora se sabe que no respetó el Presupuesto 2018 (que supuestamente contemplaba medidas de austeridad) y que cada mexicano ahora debe unos 66,000 pesos como resultado.
1.8 billones gastados que no tenían
Datos compartidos por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) señalan que el PRI gastó 1.8 billones de pesos con los que no contaban en tan solo seis años. Este dinero, claramente, tendrá que ser pagado por los nuevos gobiernos (el de Obrador y los que le sigan) a través de impuestos a los ciudadanos. Con esto se deja ver una total indiferencia a los límites financieros establecidos en los paquetes económicos de su sexenio.
El actual presidente mexicano ha sido bastante insistente en esta deuda. Obrador ha repetido en varias ocasiones que se le heredó un país “en quiebra”, calificando la crisis económica como “un cochinero”. Todo parece apuntar a Enrique Peña Nieto y su gabinete, acusados la mayoría de despilfarros, desvío de recursos, derroche de presupuesto y lujos durante los 72 meses de actividad priista.
Pudieron salvar a Pemex
Analistas apuntan a que los gastos extra del gobierno peñista se debieron a una falta de equilibrio de poderes. No hubo realmente otro poder, ajeno al ejecutivo, que revisara, criticara y alertara sobre los excesos en el gasto que hacía Peña Nieto cada año. Hablamos de un personaje ligado a un conflicto de interés por su mansión en 2014. Además, el mexiquense mandó comprar un nuevo avión presidencial de 1,980 millones de pesos.
Con una deuda de 1.8 billones de pesos, el gobierno mexicano actual podría saldar rápidamente la crisis económica que atraviesa Pemex o la CFE. Esto ha dejado con deudas enormes a la mayoría de secretarías mexicanas e instituciones de salud. Recordemos que hace unas semanas el ISSSTE alertó de una posible bancarrota por la enorme deuda que acumulan.
Mira toda la información en este recuento del IMCO.