Presidentes de México podrán ser juzgados por estos 6 delitos
Durante décadas se nos repitió que la única razón para que un presidente fuera juzgado era por traición a la patria. La justicia mexicana mantenía prácticamente como intocable a sus presidentes, por lo que nunca se ha abierto un juicio para llevar a la cárcel a un expresidente o presidente mexicano. Pero las cosas han cambiado desde que llegó López Obrador al poder.
El tabasqueño se ha esforzado por cambiar esta ley que mantenía un blindaje total para la figura presidencial mexicana. Durante décadas se consideró como “traición a la patria” a actos que pusieran el peligro al país, pero realmente no había un marco sólido para determinar qué actos podrían abrir un juicio en contra de un presidente. Ahora la lista se incrementa bastante, agregando el delito de corrupción (una constante de los últimos gobiernos en México).
Morena ha logrado desde las cámaras legislativas que las presidencias en el país sean consultadas al tercer año para ver si el presidente continúa o no en el poder. La medida es aplaudida por la izquierda pero ha generado alarmas en la derecha, quienes aseguran que esta medida es antidemocrática y totalmente propagandística.
Pero también se podrá juzgar a un presidente por delitos como traición a la patria, corrupción, delitos electorales, trata de personas, delincuencia organizada o cualquier delito con arma o uso excesivo de violencia. Todo esto se trata de una gran reforma al artículo 108 de la constitución mexicana, un párrafo que fue prácticamente intocable durante muchos años en México. Con esto, los presidentes después de López Obrador (él incluido) estarán bastante vigilados y serán juzgados con mayor facilidad en caso de algún delito.
Pero cercanos al presidente tabasqueño aseguran que estas medidas pueden ser usadas por rivales o grupos políticos para sacar rápidamente de su puesto a un presidente incómodo. Recordemos cómo la oposición en Perú, Argentina, Brasil y otras naciones ha abierto procesos en contra de presidentes y expresidentes, todo para alterar la agenda política y llamar a nuevas elecciones en donde en ocasiones salen beneficiados.
El proceso para iniciar una investigación y juzgar al presidente de México tendrá que hacerse presentando la acusación ante la cámara de senadores, en donde se tiene que presentar también una solicitud similar por parte de la cámara de diputados. Una vez presentado todo esto, se podrá proceder legalmente en contra del presidente mexicano en caso de que dos terceras partes de los senadores voten a favor. La línea no es muy sencilla tampoco, por lo que no será tan fácil llevar a prisión a un líder del ejecutivo (aunque sí más sencillo que antes).
La iniciativa se ha propuesto también para que aplique a diputados y senadores federales. Recordemos que la oposición a López Obrador votó en contra de la eliminación del fuero, por lo que se podría generar un nuevo gran debate si llegara a ampliarse la iniciativa para legisladores mexicanos. Por el momento, el gobierno obradorista suma una promesa de campaña cumplida mientras los partidos opositores aseguran que todo esto es una gran mentira.