Margarita y Calderón no están sumando militantes a su partido
Se trata del matrimonio más poderoso de la ultraderecha en México, después del accidente de los Moreno Valle. La excandidata presidencial y su esposo están enfocando toda su agenda en sumar nuevos militantes a México Libre, un partido católico que podría estar en las boletas electorales de los próximos años. Esta intención por sumar partidarios inmediatos es por los tiempos que el INE les ha exigido a los expanistas.
Margarita y Calderón tienen poco tiempo para sumar a militantes y crear los difíciles distritos en todo el país para garantizar que cuentan con apoyos en cada uno de los treinta y dos estados mexicanos. Pero no ha sido sencillo, el expresidente mexicano ha insistido en redes sociales (Twitter, su canal favorito) para que los mexicanos de derecha se unan a su esfuerzo por mantener poder político. Margarita hace lo mismo, pero con apariciones públicas y desayunos.
El dúo conservador no ha reunido a los militantes que esperaba y las acciones para invitarlos vienen acompañados de peticiones de dinero para mantener a México Libre. Recordemos que otros partidos mexicanos también están sedientos de nuevos militantes, por lo que ofrecen beneficios como atención médica, mayor representación, actividades culturales, entre otras, pero no dinero directamente.
En redes sociales, Felipe Calderón solicita dinero para los gastos operativos de su posible nuevo partido. Esto deja ver poco músculo económico después de que se le negara la pensión presidencial, una fuerte entrada económica por haber trabajado seis años. Además, el tema económico persigue al matrimonio desde hace tiempo. Recordemos que Margarita Zavala abandonó su candidatura presidencial, después de que un alto empresario dejó de inyectar recursos a su campaña.
Desde el lado electoral, Margarita ha encontrado un apoyo tremendo por parte del INE. Ignoraron los delitos electorales que realizó al duplicar y sacar fotocopias para lograr la candidatura presidencial independiente, además de minimizar las multas por estos actos. Ahora, las autoridades electorales han abierto las puertas para que el matrimonio Zavala-Calderón pueda acceder a su propio partido. Pero no ha habido demasiado apoyo ciudadano.
Los requisitos para unirse a México Libre son bastantes. En principio, la plataforma conservadora solicita la afiliación directa, luego requiere que se adhieran más personas por cada nuevo militante. Además, se pide que cada persona organice asambleas distritales de al menos 300 personas, para después requerir un donativo a la causa (con la promesa de que es mejor esto que a solicitar dinero del gobierno).
México Libre promete dar “libertad para invertir, producir, comprar, ahorrar y vender”, algo que los militantes aún no saben realmente como es que recibirán al unirse al dúo católico.
Zavala insiste en que toda esta asociación será sostenida únicamente con las donaciones de sus militantes, siempre con la negativa a recibir recursos públicos (básicamente la actitud que la orilló a abandonar la contienda presidencial al negarse a recibir dinero por parte del INE). El tiempo encima mantiene a Zavala y Calderón solicitando apoyos y recursos para aparecer en la siguiente elección presidencial (justo en donde quieren recuperar el poder).