Calderón y Marko Cortés se pelean por los votantes conservadores
Ya han pasado meses desde que el expresidente mexicano decidió renunciar al partido que lo llevó al poder. Calderón sabía que no tenía mucho control dentro del panismo nacional, por lo que decidió, al igual que su esposa, abandonar un barco ya bastante dañado. El matrimonio conservador rápidamente anunció su intención de crear un nuevo partido, por lo que buena parte de los interesados estarían en la militancia de Acción Nacional.
Pero claramente el presidente del partido conservador no quiere permitir esta fuga de militantes. Marko Cortés, también michoacano, no mantiene buenas relaciones con el expresidente panista, por lo que ya prepara un programa de adiestramiento a su militancia para consolidar los valores del PAN. El miedo es que la imagen de Zavala y Calderón le arrebate militantes al partido azul, que ya de por sí ha perdido seguidores durante la era Anaya.
La intención es que tanto Cortés como el dúo Zavala-Calderón están moviendo sus piezas para representar al voto conservador para las elecciones intermedias de 2021. El PAN es la segunda fuerza nacional, pero quedó bastante golpeado después de las elecciones del año pasado. El dúo expresidencial tuvo que renunciar a la contienda nacional por falta de dinero y en México Libre, su nuevo partido, buscan ser los grandes representantes de la derecha para los próximos años. En medio están los votantes conservadores mexicanos.
Recordemos que Morena lideró las elecciones del 2018, en donde ganaron prácticamente todo. Aún con el triunfo de la marea guinda, los sectores más conservadores continúan buscando personajes de la política para sumarse a sus esfuerzos en contra de los avances de izquierda de López Obrador, Claudia Sheinbaum, entre otros. Pero el panismo disgustó a sus seguidores al aliarse con el PRD y el matrimonio Zavala-Calderón arrastra los escándalos de su sexenio (además del desastre de la guerra contra las drogas).
Marko Cortés ya ha iniciado reformas internas en su partido para asegurarse a la mayor cantidad de nuevos militantes posibles. El michoacano promete que no habrá decisiones de peso que no se tomen sin el voto o la opinión de la militancia conservadora (algo que Ricardo Anaya negó desde que entró al cargo hace unos años). Ahora se ablanda el ingreso a las filas del PAN, todo con la intención de sumar mexicanos de derecha, además de quitarle gente a México Libre.
Por el otro lado, Margarita Zavala y Felipe Calderón están viendo difícil el camino para crear su partido. Si bien el INE les ha abierto todas las puertas posibles, el dúo católico batalla para encontrar simpatizantes en todo el país. Además, el expresidente michoacano ha lanzado la invitación a que no solo se sumen a su nuevo partido, sino que donen recursos para sostenerlo (lo que deja ver de nuevo problemas financieras en el matrimonio que gobernara de 2006 al 2012).
Lo cierto es que los errores de López Obrador y su partido siguen acumulando fuerza para los grupos conservadores, quienes se ven como los más grandes beneficiados de las fallas y problemas de organización que ha dejado ver el gobierno morenista. Para 2021, las elecciones intermedias podrían quitarle al partido guinda la mayoría en las cámaras legislativas (justo en donde el PAN y México Libre quieren entrar de lleno). Además, para 2024 ya se preparan para competir por la presidencial: unos queriendo gobernar un sexenio más y otros con la intención de regresar a Acción Nacional a lo alto del poder político.