Movimiento Ciudadano, la posible nueva casa de experredistas
Hay dos cosas inevitables en el perredismo nacional: se están yendo en masa sus integrantes y ya no son bienvenidos como antes en Morena. Recordemos que el partido guinda prácticamente abrió sus puertas sin peros a miles de perredistas, desde Miguel Barbosa hasta Marcelo Ebrard, todos los amarillos ahora responden como guindas. Pero desde la dirigencia se analiza si se podrá recibir a ejemplares como Mauricio Toledo o Alejandra Barrales.
Y es que en el PRD no queda mucha esperanza. Hace poco renunciaron en masa ocho diputados, haciendo aún más pequeña la representación del sol azteca en la cámara baja. Además, se espera el siguiente paso de elementos conocidos como Juan Zepeda y Barrales, ambos con esperanzas de grandes cargos políticos, pero con la certeza de que en el perredismo ya no hay mucho qué hacer. La opción entonces es naranja: Movimiento Ciudadano.
El partido de centro-derecha, autollamado “socialdemócrata”, cobró un gran poder después de las elecciones del 2018. Cansados de los partidos tradicionales, los votantes mexicanos le dieron más poder al PT y a Movimiento Ciudadano, después de Morena. Estas dos fuerzas que eran bastante pequeñas ahora tienen representación suficiente como para pasarle por encima al histórico perredismo.
Los naranjas tienen 28 diputados y 7 senadores, mucho más que el PRD.
Por lo tanto, suena como nueva casa de experredistas que por el momento se mueven como independientes. Movimiento Ciudadano decidió unirse al PRD y al PAN para las elecciones federales del año pasado, la estrategia golpeó duramente a los panistas y perredistas, pero a los naranjas les aseguró cifras históricas de representación en ambas cámaras legislativas. Además, consiguieron su primer gubernatura en Jalisco, con Enrique Alfaro.
Los perredistas saben que si el sol azteca desaparece, ya no podrán crear un nuevo partido (recordemos que enero de 2019 era la fecha límite para entregar el papeleo). Por lo tanto les queda un aliado para mudar de colores, pero mantener sus ideas políticas: Movimiento Ciudadano. Con la alianza que ya mantenían en el pasado, no parece difícil que la fuerza que comandara Dante Delgado (ahora senador plurinominal, gracias al acuerdo con el PRD y PAN) los acepte de inmediato.
Pero esto no garantiza un partido naranja completamente unido. Alfaro ha adquirido un enorme poder desde las tierras tapatías y se mueve más como independiente (cercano a la presidencia) que como aliado de Movimiento Ciudadano. Desde el senado, Dante Delgado puja por un partido completamente de oposición contra Morena y su gran poder en las cámaras legislativas y el gobierno federal. Esto ha dividido las intenciones del partido a dos hombres.
Ahí podrá llegar Alejandra Barrales, la perredista que no pudo mantener el gobierno de la Ciudad de México. Ya fue abanderada de Movimiento Ciudadano para la jefatura de gobierno y todo parece indicar que esta será su nueva casa. Lo cierto es que la militancia naranja no ve con buenos ojos que los personajes más polémicos del perredismo disfruten ahora de su hogar. Los perredistas buscan refugio y el PAN, PRI y Morena ya no con opciones tan sencillas.