Inmujeres gastó millones en publicidad y eventos en la era EPN
Ya terminó el sexenio más polémico del PRI en los últimos años y las revisiones a cómo se usó el dinero revelan cada vez más escándalos. Hay problema de derroche de recursos, desvíos, opacidad y falta de estrategias en prácticamente cada comisión, instituto y secretaría de la era Peña Nieto. Al tocar el desempeño del instituto nacional de la Mujeres (Inmujeres), se alcanza a ver una tendencia por remodelar oficinas e invertir fuerte en medios, antes que en ayudar a las mexicanas.
Para entender cómo funcionó este instituto debemos analizar la dirección de Lorena Cruz Sánchez. La priista fue anunciada entre aplausos por Enrique Peña Nieto para atender a las mujeres mexicanas en este instituto ya de por sí criticado por su poca eficacia. Desde el 2013 y hasta que pocos meses antes de terminar el sexenio del mexiquense, Cruz fue una fuerte promotora de al menos dos campañas: una para prevenir el embarazo adolescente y una más para fomentar la igualdad de género.
Estas dos megacampañas de Inmujeres costaron más de 220 millones de pesos. Ambas tuvieron fuerte presencia en medios nacionales, prensa, radio, televisión y banners en varios sitios, además de las clásicas publicidades en redes sociales. Para analistas en temas de género, hubo poco impacto de estas campañas en la sociedad, por lo que no se puede declarar que influyeron en la prevención del embarazo adolescente o que realmente hubo avances derivados en temas de género.
Inmujeres fue uno de los institutos más desapercibidos durante el peñismo. Con escándalos en Sedesol, Sedatu, Hacienda, Conade, entre otros, se le dio poca atención mediática a lo que pasaba durante la administración de Lorena Cruz. Similar al presidente mexiquense, Cruz fue una fuerte inyectora de presupuesto a publicidad oficial. Tan solo en 2016 se inyectaron 163 millones de pesos en publicidad de las campañas de Inmujeres.
Se sabe que en ese mismo año también hubo gastos por más de 20 millones de pesos para temas poco relacionados con el apoyo a las mexicanas. Este dinero fue utilizado para servicios de mantenimiento como nuevas puertas, colocación de alfombras e incluso hay más de 650 mil pesos utilizados para dar mantenimiento a las plantas en el instituto. En 2014 se firmó un contrato por 201 mil pesos para dar servicios de telefonía celular a empleados de Inmujeres. Este contrato, como muchas de la era Peña Nieto, se hizo por adjudicación directa. Además de algunos eventos que costaron más de
Otros de los gastos poco útiles para el apoyo a la mujer mexicana fueron 2.7 millones de pesos para comprar uniformes a 190 empleados (es decir, 14,643 pesos por cada uniforme). En cuestión de asesorías específicas para los proyectos de Inmujeres se llegó a pagar más de medio millón de pesos por un asesor que estuvo capacitando solamente 16 días. Para campañas de difusión sobre programas “en busca de la igualdad” se dieron contratos de adjudicación directa bastante caros. Uno de ellos estuvo vigente menos de un mes y costó 1.7 millones de pesos, en diciembre del 2014.
Esto deja ver acciones del instituto en favor de la mujer, con efectividad o no, pero también ciertos gastos fuertes que no tuvieron mucho qué ver con el apoyo a la mujer mexicana. El hecho de que Inmujeres enfocara su presupuesto a dos campañas durante casi un sexenio, deja ver un mal trazo de los intereses de la empresa. Para marzo del 2018, Lorena Cruz dejó el cargo en Inmujeres para lanzarse por una senaduría plurinominal con el PRI.
Con información de SinEmbargo.