Bolsonaro no quiere más apertura automotriz con México
Los roces entre López Obrador y Jair Bolsonaro parecen cada día más inevitables. La forma en que ambos comprenden los compromisos económicos es bastante distinta como para conciliar con los acuerdos actuales. México y Brasil han tenido buenas relaciones comerciales en los últimos años, pero la visión del nuevo presidente brasileño está tan cargada de nacionalismo que la apertura automotriz entre ambas se ve amenazada.
Todo se trata de un acuerdo firmado por ambas naciones desde hace años. Para marzo de este 2019, ambas naciones retomarán el libre comercio de automóviles ya con los nuevos rostros en ambas presidencias. Todo parecería tranquilo, pero el nuevo gobierno carioca, de corte católico-militar, ha renegado en tres ocasiones con la continuación de este acuerdo.
El nombre del pacto entre ambas naciones es el famoso ACE 55: Acuerdo de Complementación Económica 55. En el 2003 se firmó esta alianza con la llegada de Lula da Silva al poder carioca y Vicente Fox al gobierno mexicano. Las cosas han ido bastante bien y ambos países se permiten el comercio de autos exceptuando ciertos aranceles e impuestos, por lo que esta negativa de Brasil a continuar con el ACE 55 obliga a renegociar al más puro estilo Trump.
Desde que Jair Bolsonaro se hizo con el poder en Brasil, sus principales movimientos políticos han estado ligados a una defensa férrea de la industria carioca ante todo. Para ejercer su política de nacionalismo reacio, Bolsonaro busca torcer ciertos acuerdos económicos para sacar ventaja en su país antes que en el extranjero. Esta es una práctica bastante común de su par yanqui, Donald Trump, quien acostumbra amenazar con la cancelación de tratados internacionales para reestructurarlos a su favor.
Pero desde Brasil se considera que hay razón en la negativa de Bolsonaro a mantener este acuerdo. Al no tener un tratado de libre comercio entre ambas naciones, solamente se benefician ciertos sectores, por lo que los cariocas van por más. Y es que resulta inminente un nuevo gran acuerdo entre Brasil y México, las dos naciones más poderosas de latinoamérica. Pero con el apoyo de Brasil a Estados Unidos, y el de México a Venezuela, parece ser que no hay bastante coincidencia entre ambos gobiernos.
Recordemos que Brasil quiere acaparar el sector alimenticio. México es actualmente el país que más productos alimentarios envía a Estados Unidos, algo que Jair Bolsonaro quiere torcer a su favor. Para los expertos, es imposible que ambas naciones peleen por este puesto, ya que no exportan los mismos productos.
Por el momento, los cancilleres de ambas naciones ya están dialogando para ver el futuro de esta apertura automotriz. Desde el gobierno mexicano no se han mencionado negativas a mantener el acuerdo o transformarlo, pero desde el lado brasileño ya se empieza a notar la política proteccionista de Jair Bolsonaro, un hombre famoso por pelear con sindicatos y movimientos sociales.