Peña Nieto benefició solamente a grandes empresas en el campo: ASF
El sexenio del presidente Enrique Peña Nieto terminará en los próximos días con 12 compromisos cumplidos de los 17 que firmó en el 2012, que estaban enfocados en impulsar la reactivación del campo mexicano y en erradicar la crisis alimentaria que afecta a millones de personas.
Sin embargo, la administración de Peña Nieto concluirá con un campo que resultó relegado por 6 años, sumado a millonarias irregularidades al presupuesto y cuya estrategia de dedicó a concentrar los apoyos para las grandes empresas agropecuarias.
De acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación (ASF) las irregularidades en el Programa de Apoyo a Pequeños Productores ascienden a 159 millones 641 mil 100 pesos.
En el Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018, el cual fue implementado para reducir la pobreza e incidir en el desarrollo regional para impulsar la productividad y garantizar la seguridad alimentaria, no cumplió con los apoyos previstos.
Esto debido a que en el componente “Arráigate Joven-Impulso Emprendedor”, la ASF detectó irregularidades desde NCA Rural y de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, por 37 millones 247 mil 500 pesos.
De dicho compone se conforman dos conceptos: el primero es el “Proyecto de Producción Primaria y Agregación de Valor”, del cual según la ASF hubo un presunto desvío de 20 millones 6 mil 700 pesos.
De ese dinero, 8 millones 281 mil 700 pesos debían ser para 66 agrupaciones sociales, sin embargo, no se acreditaron 6 millones 519 mil 500 pesos.
En tanto que el concepto de “Capacitación y Consultoría” se detectaron presuntos desvíos de 17 millones 240 mil 800 pesos: cuatro instancias capacitadoras no acreditaron la cantidad de personas que recibirían la capacitación por 6 millones 815 mil pesos. Aunado a que otras tres instancias capacitadoras tampoco comprobaron 4 millones 10 mil 800 pesos.
Mientras que en el componente “Extensionismo, Desarrollo de Capacidades y Asociatividad Productiva” tampoco se logró determinar cuál fue el destino de 122 millones 393 mil 600 pesos.
En el concepto de “Apoyo Extensionistas”, 65 millones 472 mil pesos fueron dados a prestadores de servicios, los cuales no entregaron comprobantes fiscales. Mientras que en el “Apoyo a Centros de Extensionismos”, la ASF detectó anomalías por 56 millones 920 mil pesos.
De las irregularidades a los beneficios a las grandes empresas
Sumado a los 6 años de irregularidades que la ASF detectó en el presupuesto que fue destinado al campo mexicano, Peña Nieto dejará la presidencia sin haber logrado la seguridad alimentaria y sin poder haber erradicado la pobreza.
En su informe de la Cuenta Pública 2017, la ASF indicó que “los principales beneficiarios de los apoyados gubernamentales a través de fideicomisos son las grandes empresas”.
La Auditoría concluyó en su informe que la estrategia fue eficaz, sin embargo, ésta no generó mayor inclusión financiera ni nuevos emprendedores.
Campos agrícolas como los de Sonora, Baja California, Sinaloa, Jalisco y Chihuahua prevalece la desigualdad, debido que empresas como Bimbo, Bachoco, Lala, Maseca, Monsanto, SuKarne y Nestlé concentran la mayoría de los terrenos y su producción.
Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), 24 millones 60 mil personas viven con carencia para acceder a la alimentación.
México actualmente importa el 40% de los alimentos que se consumen en el país, cuando la Organización de la Nacionales Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) recomienda que sólo sea el 20%.
De este modo, México sólo cubre el 21% del arroz necesario, el 68% del maíz y el 50% del trigo: lo demás se compensa con las importaciones.
Con información de La Política Online y Sin Embargo