Ya se organiza la toma de protesta de AMLO, la más austera posible
Se viene una fecha clave para la vida del político tabasqueño. López Obrador ha buscado tener la banda presidencial atravesando su pecho desde hace más de diez años y el próximo primero de diciembre la recibirá de manos de Porfirio Muñóz Ledo. Muchos pensaban que el todavía presidente Peña lo haría, pero será el icónico político de izquierda el que envista a AMLO.
Para que la ceremonia se realice sin problemas, Ledo se ha reunido con los futuros estrategas de seguridad nacional para delinear cada detalle de la toma de protesta del tabasqueño. Se habla de una investidura llena de solemnidad y austeridad, el sello con el que quiere relacionarse Morena desde que inicie el primer gobierno de izquierda en México. Porfirio ha dejado en claro que Obrador ha pedido una toma austera, ante todo.
Las condiciones de seguridad deben estar bien planeadas. Obrador ha anunciado que serán al menos 120 mandatarios de todo el mundo los que asistirán a su toma de protesta en diciembre de este año. La intención del morenista es invitar a mandatarios de todos los países en donde México tiene embajadas. La invitación va desde Donald Trump hasta Emmanuel Macron, desde Putin hasta Mauricio Macri.
Por lo tanto el primero de julio se tendrá una agenda que privilegie la seguridad de los visitantes antes que el lujo que se les ofrezca. Obrador es un político que ha procurado emitir una imagen de sencillez, en donde no cabe el derroche, desde su discursos hasta su apariencia. Con esta misiva, el tabasqueño pretende instaurar desde su toma de protesta la idea de un gobierno que no va a derrochar dinero público.
Muñóz Ledo asegura que la toma de protesta de Obrador será distinta a las demás. Asegura que esa tarde se refundara la República, por eso mismo el acto debe ser recordado por su sencillez y avance en seguridad. Y es que el izquierdista ha dejado en claro que aún no se sabe el número exacto ni los nombres de los mandatarios extranjeros que estarán presentes en la toma de posesión.
Los encargados de la seguridad del evento serán Alfonso Durazo y Alejandro Gertz. Este par, bastante cercano a Obrador desde hace años, tendrá la tarea de generar una reunión en donde no haya ni una sola alarma de seguridad. El reto parece menos complejo que en ocasiones anteriores. Recordemos que durante la toma de protesta de Felipe Calderón se vivió una batalla entre diputados de derecha e izquierda, acusando un fraude electoral.
Para este primero de diciembre, México verá por primera vez el ascenso de un gobierno de izquierda. Encabezado por su partido, Morena, López Obrador contará con mayorías legislativas en la cámara de diputados y senadores. Con esto, parece ser que no habrán conflictos entre bancadas. Los conservadores de Acción Nacional y los priístas en la cámara de diputados no han mostrado señales de un asalto al recinto.