Adiós a la «Ley bala», el capricho represor de Moreno Valle
Se trata de un hombre que enfurecía cuando su proyecto de gobierno se veía entorpecido por reclamas sociales. A Rafael Moreno Valle, el panista que gobernara Puebla con mano dura, no le gustan las manifestaciones ni las críticas. Por eso mismo es que movió su poder en el congreso poblano y aceleró la aprobación de la “ley bala”, una reforma que le permitía la represión ante manifestantes en contra de su gobierno.
¿Qué buscaba la ley bala? En principio, legitimar el uso de la fuerza pública para terminar con manifestaciones que las autoridades consideraran dañinas para la imagen del gobierno de Moreno Valle. Esta acción, aseguran sus detractores, es un claro ejemplo de cómo se puede atacar a los derechos humanos de los poblanos desde el terreno legal. La ley bala prácticamente era un instrumento de represión al estilo Díaz Ordaz que estaba amparado por el congreso local.
Con esta intención, Moreno Valle imponía su estrategia de que Puebla sería un estado libre de manifestaciones, señalamientos o críticas al gobernador. El matrimonio Moreno Valle se ha conocido por no tolerar al periodismo crítico ni soportar manifestaciones como las grandes marchas de sindicatos en sus calles. Con la renovación del mandato del panista a través de su esposa, parece ser que las intenciones de represión van a continuar en Puebla.
Pero el congreso poblano ha votado después de menos de una hora de discusión para tumbar la ley bala de Moreno Valle. La principal crítica es que no podía continuar en activo una ley que ha generado tanta presión social desde que se estaban discutiendo hace algunos años en el congreso local. Con mayoría, quedó derogada la famosa ley represora y los panistas poblanos no pudieron salvarla, a pesar de sus esfuerzos por convencer a los otros diputados.
Ya en activo, la ley bala permitió que policías pudieran recurrir inmediatamente a la violencia en varias protestas ciudadanas en Puebla. Con esto, se criminalizó a los manifestantes y las fuerzas de seguridad adquirieron la libertad de reprimir de inmediato las marchas y plantones en el estado de Puebla. Recordemos que en los territorios gobernados por el PAN es bastante común la cero tolerancia ante la protesta ciudadana. En el caso poblano, Moreno Valle radicalizó la intolerancia.
Con esta ley, la policía de Moreno Valle logró destruir protestas ciudadanas de inmediato. Un caso notorio fue la violencia que se utilizó en la carretera Puebla-Atlixco, en donde pobladores de una comunidad cercana se manifestaban por las reformas que se hicieron a la ley municipal de San Bernardino Chalchihuapan. Con la ley bala recién aprobada de forma unánime, la policía de Moreno Valle atacó a los manifestantes y dispararon gases en contra de los manifestaciones, hiriendo y matando a un niño de trece años.
Este caso cobró fuerza a nivel nacional y de inmediato fue criticada la estrategia legal de Moreno Valle para justificar la represión, además de los agravios a los derechos humanos a consecuencia de la ley bala. A pesar de las críticas y los señalamientos de violencia, Moreno Valle nunca echó para atrás esta ley.