Gobernador de Guanajuato gastó un millón de pesos al día para publicitarse
Durante 2016 y 2017, Miguel Márquez, gobernador de Guanajuato, quería ser candidato presidencial del PAN y para lograrlo gastó casi un millón del pesos al día durante estos dos años, reveló el portal Zona Franca. Repitió esquemas de desvío de fondos que ya se han visto en otros casos, por ejemplo, solicitó servicios a empresas que ya han sido ubicadas por el SAT como fantasmas. También contrató especialistas en manejo de imagen y servicios para redes sociales.
En los reportes publicados en internet estos gastos no se han reflejado al cien por ciento. Con el dinero del erario público Márquez buscó proyectar su imagen a nivel nacional y rebasó el gasto de comunicación social en su beneficio mientras otros aspectos del gobierno quedaron relegados.
En el 2017, Márquez anunció que el gobierno aplicaría un programa de austeridad que comenzó por cancelar el servicio de celular a funcionarios públicos y se disminuyó el sueldo de altos mandos. Pero en esta «austeridad» el presupuesto de comunicación social se elevó de 170 millones a 390 millones de pesos, reportó Zona Franca.
Otras dependencias recibieron menos
El exgobernador Juan Manuel Oliva gastó en total 495 millones en este concepto y fue ampliamente criticado. Sin embargo, en el sexenio de Márquez se rebasaron los mil 326 millones de pesos. Mientras que Oliva incrementó el gasto publicitario al 54 por ciento, Márquez lo aumentó al 274.33 por ciento, entre 2013 y 2017.
Según información de Zona Franca, se puede contrastar el aumento de Comunicación Social con otras dependencias. Por ejemplo, justicia solo tuvo el cuatro por ciento, educación seis por ciento, mientras que salud, protección social y seguridad solo nueve por ciento.
Además, la mayoría de los contratos de este gobierno se dieron con muy poca transparencia. Aunque el artículo 26 de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información obliga a que se publiquen contratos y facturas, sólo un porcentaje realmente se hizo público. El Instituto de Acceso a la Información Pública, dirigido por María de los Ángeles Ducoing, no intervino para que se establecieran responsabilidades.
Para todos aquellos neochairos que afirman que en Guanajuato estamos a toda madre y que el tres veces"M" Miguel Márquez Márquez ,es el gobernador mejor calificado del país. Una dosis de la corrupta realidad de Guanajuato. https://t.co/AAVFU6a3bI
— Javier Bravo (@haljordan158) July 16, 2018
No hay transparencia en contratos
De los mil 326 millones gastados, sólo hay contratos por 426 millones de pesos y solo están sustentados con facturas 284 millones. Además, los registros están desordenados y no se puede acceder a todos los documentos ya que las ligas están rotas.
Es paradójico que las secretarías con más opacidad son Desarrollo Económico Sustentable y Transparencia y Rendición de Cuentas. Se informó que el problema es que no se ha invertido en la capacitación de los servidores públicos para las obligaciones de transparencia.
Las empresas que más recibieron durante su sexenio fueron Televisa, la Organización Editorial Mexicana y Televisión Azteca. Las empresas de Grupo Salinas, incluyendo a TV Azteca, recibieron en cinco años 233 millones de pesos. Sin embargo, lo hacen mediante un esquema separado de Grupo Salinas por lo que pueden realizar doble facturación.
Según una investigación de Proceso: «su objetivo principal es «vender» servicios a gobernadores en apuros o a aspirantes a presidente, así como a alcaldes de distinta entidades».
Jeshom Publicidad y Mercadotecnia obtuvo 10.5 millones en tres años y cobró 3.5 millones por un video promocional de Guanajuato. En varias de las contrataciones con el gobierno no se transparentaron las facturas ni se publicaron los comprobantes de pago o contratos.
Televisa obtuvo 115 millones 96 mil pesos en cinco años por difundir spots en sus canales. En más de 50 contratos no hay más detalles, sólo se indica que son servicios publicitarios o de difusión. Aunque cuando inició el gobierno de Márquez aparentemente había una preocupación para que se lograra la transparencia, seis años después se vio que sólo se realizaron cambios cosméticos que en realidad no lograron nada esencial para combatir el gasto ni la corrupción.
Lee la investigación completa en Zona Franca.