El ejército mexicano volverá a los cuarteles en 2021: Alfonso Durazo
México lleva doce años en guerra permanente para detener el narcotráfico en México. La cantidad de muertos, secuestrados y familias destruidas han orillado a los partidos políticos ha buscar dos soluciones: la derecha busca continuar con la vía armada para solucionar el conflicto y el nuevo gobierno de izquierda quiere evitar las balas y buscar otras formas de pacificación.
López Obrador busca regresar a los militares a sus cuarteles y se prevé que en tres años funcione esta estrategia por completo, según palabras de su posible secretario de seguridad, Alfonso Durazo. Para los morenistas, la estrategia bélica iniciada por Felipe Calderón no puede continuar y es necesario erradicarla de inmediato, por lo que se prevé una ley de amnistía para no replicar las cifras de asesinatos del 2017, en la era Peña Nieto.
Durazo asegura que México no puede continuar con 29 mil muertos anuales. Por eso están generando una reestructuración del conflicto con los cárteles del narcotráfico, buscando restar poder a estas organizaciones a través de la legalización de la cannabis y la amapola. Para Olga Sánchez, futura secretaria de gobernación, estas acciones lograrán detener los asesinatos y el tráfico a un nivel mucho más alto que la violencia entre policia-marina-ejército y los hombres armados.
Pero regresar al ejército mexicano a sus cuarteles no es una tarea sencilla. Es necesario primero adiestrar a los mandos policiacos para que puedan cubrir el área de seguridad que ahora mantiene, de manera exclusiva, los elementos del ejército y la marina armado de México. Este proceso será largo, asegura Durazo, pero bien ejecutado podría sacar a los militares de las calles para el 2021, justo a media presidencia de López Obrador. El tabasqueño ya aseguró que trabajará a marchas forzadas para completar sus promesas de campaña.
Para nuestro gobierno la seguridad será una prioridad, por ello hemos acordado una reunión para dialogar con el colectivo #SeguridadSinGuerra sobre la LSI y los temas relacionados en su comunicado
— Alfonso Durazo (@AlfonsoDurazo) July 6, 2018
Datos de la industria privada aseguran que México ha perdido 21% de su producto interno bruto gracias a esta guerra contra el narcotráfico. Desde el 2006, el país ha sido relacionado con la violencia de los cárteles de droga y secuestros. Esto derivó en graves problemas para atraer turismo internacional. Incluso varios países mantienen a sitios como Acapulco, Culiacán, entre otros, en la lista negra de lugares a visitar.
La idea de López Obrador y Durazo es entregar un país pacificado para 2024. Es decir, en las próximas elecciones presidenciales, Morena deberá mantener una imagen de partido a favor de las causas sociales para lograr repetir presidencia al terminar Obrador y continuar con lo que el tabasqueño llama “la cuarta transformación de México”. Por el momento, Peña Nieto mantiene una de las presidencias más violentas de la historia. En 2017 hubo más de 30 mil asesinatos violentos.
En un país en donde mueren familias en fuego cruzado, periodistas por investigar a políticos, candidatos por intentar limpiar municipios conflictivos y policías-militares-marinos por intentar frenar al narcotráfico, la opción pacífica de Obrador suena oportuna. El tabasqueño ya arrancó las transiciones para lograr arrancar el primero de diciembre con reformas en materia de seguridad para lograrlo.
El encargado del ejercito mexicano, Salvador Cienfuegos, aseguró que sus elementos están cansados de una guerra permanente que se ha extendido doce años. Y lo dijo en presencia de Peña Nieto, un presidente que simplemente calcó la estrategia de Calderón sin escuchar las opiniones de los militares mexicanos.
