Empresa italiana envuelta en caso de corrupción, gana contrato para el NAICM | BREAKING
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Empresa italiana envuelta en caso de corrupción, gana contrato para el NAICM

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Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM)

Una de las obras más relevantes del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) ha sido entregada vía licitación a las compañías Proc Mina, propiedad de la regiomontana Arendal; y a Astaldi, de Italia. Se trata del Centro de Transportes, que integrará estaciones del Metro, Metrobus y toda una red de servicios de transporte, toda vez que se trata del edificio que conectará a los usuarios con la terminal.

Lo delicado es que Astaldi parece tener esqueletos guardados en clóset: arrastra un caso de corrupción en el Salvador, que le dejó un pago “ilegal” de $108 millones de dólares aun cuando realizó sólo el 20% de los trabajos que el gobierno peruano le encomendó para la presa El Chaparral.

Como puede constatarse en medios, la construcción de esta represa salvadoreña se detuvo en 2010, cuando Astaldi alegó que la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL) no le había proporcionado toda la información geográfica donde se construiría la obra.

Alegó que la zona presentaba hundimientos, movimientos de tierra y hasta una falla geográfica. Motivo por el cual la compañía abandonó las obras, y gracias a un “acuerdo directo”, la CEL le pagó 108 millones de dólares a la compañía como indemnización, sin que revelara los porqués del acuerdo.

La Fiscalía Salvadoreña no ha logrado terminar sus investigaciones, pero apunta a un serio caso de corrupción entre José Leopoldo Samour, entonces titular del CEL, el propio gobierno del ex presidente Mauricio Funes, y la compañía presidida por Filippo Stinellis.

Aquí en México, el gobierno federal ha dado cuenta de que el espacio de construcción para la Central de Transportes tiene una superficie de 81,640 metros cuadrados, repartidos en cuatro niveles; mismos que tendrán estacionamientos, terminales de autobús y espacios comerciales.

El proyecto tendrá un costo aproximado de 6,498 millones de pesos. Pero, por el antecedente de Astaldi en El Salvador, existen dudas respecto de su legitimidad. Incluso, como lo reporta La Política Online, existe la duda sobre la viabilidad en la oferta económica de Astaldi.

Por ser uno de los grandes proyectos del NAICM, Astaldi compitió contra gigantes como ICA, OHL y La Peninsular, pero “ofreció una cantidad de gasto para la obra muy menor, tan inferior que despertó inquietud entre las otras firmas que competían por el proyecto”, se puede leer en el reporte.

Se teme que no haya viabilidad en la oferta económica de Astaldi, y se repita un fiasco como el de El Salvador, toda vez que el proyecto del NAICM ha sido lapidado por Andrés Manuel López Obrador, candidato a la presidencia por parte de la coalición “Juntos Haremos Historia”, precisamente por estar planeado “en el corazón del lago de Texcoco, una zona con severos hundimientos”.

El tabasqueño incluso publicó un cómic en donde daba sustento a todo lo anterior. El semanario Proceso, también dio cuenta de las implicaciones de los hundimientos en el proyecto, y reportó que podría derivar en una serie de jugosos negocios y contratos “que el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) trata de ocultar”.

Y es que para construir las pistas del aeropuerto se necesita drenar toda el agua del subsuelo, y luego cimentar el terreno, para ello, se destinaron alrededor de “7 mil 926 millones de pesos, una de las sumas más altas entre los 292 contratos que se han licitado y adjudicado para la construcción del NAICM”, señala el reporte de Proceso.

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