Desplazados en Chiapas siguen viviendo en condiciones infrahumanas | BREAKING

Desplazados en Chiapas siguen viviendo en condiciones infrahumanas

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El día de ayer, el párroco Marcelo Pérez urgió a las autoridades a hacer algo respecto a los desplazados en Chiapas, por el conflicto entre Chenalhó y Chailchihuitán. Hasta el momento han muerto 11 personas y la ayuda brindada tanto por el gobierno como por la sociedad civil no es suficiente. La primera de estas víctimas murió asesinada con un arma de fuego al inicio del conflicto y las diez restantes fallecieron por causas relacionadas con la desnutrición y el frío, cuatro infantes, cinco personas de la tercera edad y un adulto, informó el párraco para Aristegui Noticias.

El sacerdote mencionó que es de vital importancia que el gobierno resuelva el problema y no nada más envíe ayuda que solucione problemas momentáneos. Las personas desplazadas están desesperadas por volver a sus tierras, sin embargo temen por su vida por lo que continúan soportando condiciones infrahumanas de frío y hambre en las montañas.

En un video publicado por Aristegui Noticias, se puede ver como la cena de Navidad de al menos 300 desplazados fue una tortilla y una taza de café. También se puede escuchar el llanto de los niños quienes están enfermando debido a que la temperatura es de al menos diez grados bajo cero. Marcelo Pérez dijo que estas comunidades viven en extrema pobreza y que ahora se ha recrudecido por tener que huir de sus tierras.

Conflicto sin solución

Desde el 18 de octubre de este año, grupos armados en Chenalhó comenzaron a disparar a lo habitantes de Chalchihuitán, incendiaron casas y asesinaron a una persona, por lo que tuvieron que huir hacia las montañas. Marcelo Pérez opina que lo que estos grupos armados buscan es aterrorizar a los habitantes de Chalchihuitán  para someterlos y dominar a la comunidad. Sin embargo, menciona que “ellos están dispuestos a resistir y no ceder, porque tienen su terreno legalmente”.

Después de que el tribunal agrario fallara a favor de Chenalhó, los grupos armados siguen disparando para intimidar a los habitantes de Chalchihuitán. Este fallo de alguna manera legitimó a los grupos armados, mencionó el párraco. En su opinión “no se dieron las condiciones para dar el fallo, no fue un proceso porque no hubo camino para la paz”.

Buscan soluciones y ayuda

El sacerdote dijo que es importante que se establezca un diálogo entre ambas comunidades, debido a que hay mucho sufrimiento, especialmente los niños que padecen hambre y frío, ya que duermen sobre cartones y se cubren con cobijas muy delgadas. 

La sociedad civil puede ayudar donando cobijas, productos que no estén enlatados como maíz, azúcar, arroz, cal, frijol, sal, ropa para cubrirse sobre todo para niños, utensilios para cocinar o donando directamente a Cáritas San Cristóbal de las Casas.

Hay una verdadera crisis humanitaria y de no hacer algo pronto podrían haber más muertos debido a las condiciones en las que se encuentra esta comunidad de refugiados. Ni las autoridades municipales ni estatales están realmente resolviendo el problema. Hace dos días se reunieron funcionarios del gobierno de Chiapas y de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos con el representante de la oficina en México del Alto Comisionado de la ONU, Jan Jarab, para evaluar avances y establecer estrategias para ayudar a ambas comunidades.